Las siete expulsiones sufridas por el Guadalcacín el pasado domingo en Tarifa sin duda van a traer cola. Hay que recordar que en el transcurso del encuentro fueron expulsados el jugador Jesús, el entrenador del equipo, Paco Ramírez, y el delegado. La cosa no quedó ahí, ya que en el túnel vestuario a la finalización del choque vieron la tarjeta roja directa cuatro jugadores más del conjunto jerezano: Casqueiro, Pantoja, Viki y José Manuel.

El árbitro del partido, Lobatón Santos, adscrito al colegio algecireño pero tarifeño de origen según aseguró ayer el técnico del Guada, reflejó en el acta graves y variados insultos hacia su persona. Paco Ramírez estaba que trinaba: "Ya antes de empezar el partido y después de firmar el árbitro me llamó para decirme que no pensaba consentir la más mínima protesta. La verdad es que eso lo vi raro porque no venía a cuento. Ya en el transcurso del juego, sobre todo después de que marcáramos el tercer gol, todo nos lo pitó en contra y encima consintió que los jugadores del Tarifa acribillaran a los nuestros a patadas con total impunidad. Incluso, viendo lo que estaba ocurriendo algunos futbolistas nuestros me pidieron retirarnos".

La acción de su expulsión la explica así Paco Ramírez: "Antes de echarme el árbitro ya me había amenazado tres veces con hacerlo cuando en ningún momento le falté al respeto y menos todavía le insulté . Llevo muchos años en el fútbol y en mi vida he visto una cosa como la del domingo. Después me encuentro con la sorpresa de que en el acta pone que me echó porque le dije que se fuese a la mierda. No quedó contento con eso y también reflejó que en el túnel de vestuarios le dije que era una mala persona y una mierda. Lo primero lo reconozco pero lo segundo es falso".