El Jerez Industrial sigue en lo más alto de la clasificación después de lograr ayer la segunda victoria de la temporada frente a un Tesorillo de lo más ramplón, que nunca llevó peligro a la meta de Fabio y que incluso se mostró marrullero con varias acciones merecedoras de cartulina amarilla que el colegiado Macías Fornell no concedió.

El equipo de Juan Pedro Ramos va asimilando poco a poco los conceptos que quiere el míster y si hace una semana desarbolaba a la Roteña en el Puntas Vela (1-5) ayer consiguió un triunfo académico, sin estridencias pero siendo muy efectivo. Ayudó, y mucho, el gol de Jesús Vega a los 41 segundos de la reanudación. También, todo hay que decirlo, el poderío físico de los locales frente a un rival que llegó con varios futbolistas 'pasaditos' de peso. Ni siquiera echando mano de los terribles cambios volantes (vaya chorrada que se ha sacado la Federación Andaluza de la manga) pudo el conjunto campogibraltareño aguantar el ritmo de un rival que con el segundo, obra de Casares, sentenciaba el encuentro.

Carrasco se lesiona en la jugada del primer gol y es difícil que llegue para jugar en Guadiaro

No todo fue positivo, ya que Juanma Carrasco se tenía que retirar tras la consecución del 1-0 con una lesión muscular, pendiente de evolución aunque parece descartado para el importante partido que tienen los blanquiazules el próximo fin de semana en casa del Guadiaro.

Juan Pedro Ramos apostó por un equipo similar al de la primera jornada, con la entrada de Morlán -sancionado en Rota- por Piti. Al ariete se le vio voluntarioso pero falto de ritmo y fue uno de los cambios que introdujo Juan Pedro tras el descanso.

Comenzó el Jerez Industrial brioso, sobre todo por las bandas, por las que David Casares y Juanma Carrasco percutían una y otra vez al Tesorillo, aunque con poca precisión en los centros al área. Parra y Yuni formaban el doble pivote en el centro del campo y Dani Castro actuaba con más libertad algo más adelantado, iniciando la presión alta que Juan Pedro quiere implantar en el equipo. En defensa, Rodri repitió en el centro de la defensa junto a Álex, siendo los laterales para Güiza y Quintero.

Con todo, a los locales les costó llegar con algo de peligro a la meta defendida por Álvaro. El primer acercamiento fue en un centro desde la banda derecha de Casares que Yuni remató por encima del larguero. A diez minutos para el descanso, Juanma Carrasco -el más activo y con una marcha más que el resto- estuvo cerca de aprovechar un error de Ferdi, pero sin apenas ángulo su disparo lo rechazó bien el meta visitante. La última de la primera parte la tuvo Álex en un remate de cabeza que se fue por encima del larguero. El Tesorillo apenas si pasó del centro del campo en los primeros cuarenta y cinco minutos, mostrando una sensación bastante pobre y muy alejada del equipo que la pasada temporada estuvo en las primeras posiciones durante bastantes jornadas.

La segunda parte arrancó de la mejor forma para los intereses locales. Juan Pedro dio entrada a Piti y a Vega y situó a Casares en punta en sustitución de Morlán. Precisamente fue Casares, en un rápido ataque, quien asistió a Juanma Carrasco; éste se adentró en el área, su zurdazo lo repelió Álvaro y el rechace lo remachó Vega al fondo de la red. En esa jugada se lesionó Carrasco, que en principio y a falta de pruebas tiene una lesión muscular que probablemente le obligará a parar unas semanas.

Con el 1-0 en el marcador (olvídense del electrónico, que lleva años sin funcionar), el Tesorillo adelantó tímidamente las líneas y Juanca tuvo la única ocasión de empatar aunque su disparo se marchó desviado a la derecha de Fabio.

Juan Pedro y Javier Linaza comenzaron a mover los respectivos banquillos, con clara ventaja para el primero, con 18 citados por los 16 de un rival que físicamente no aguantó el ritmo de los locales. Alberto Gil y Moi dieron más mordiente al ataque industrialista, aunque este último pecó a veces de 'sobar' el balón cuando el partido pedía claramente jugar a pocos toques.

No obstante, el segundo gol podía caer en cualquier momento dada la superioridad del líder de la categoría. Casares lograba el tanto de la tranquilidad (minuto 65') rematando a placer un centro desde la banda derecha de Piti. A partir de entonces, el Jerez Industrial contemporizó el partido y no quiso hacer sangre ante un rival que poco a poco se fue apagando.