MOTOCICLISMO | GRAN PREMIO DE LA COMUNIDAD VALENCIANA

Sólo un diluvio puede con Márquez

  • Sumó la caída 23 del año bajo la ciclogénesis de Cheste y ya lleva 170 en 10 mundiales

  • Ganó Dovizioso y Pedrosa logró un meritorio 5º puesto en su despedida

Al emperador francés Napoleón se le atribuyen la mayoría de frases bélicas célebres, pero hay una que define de forma impecable lo ocurrido ayer en el circuito valenciano de Cheste: "El campo de batalla es una escena de caos constante. El ganador será quien controle ese caos, tanto el suyo como el de los enemigos". Bajo una ciclogénesis explosiva y muy a su pesar, el pentacampeón de MotoGP Marc Márquez cayó derrotado, no por la acción directa de sus rivales, sino por su propio ímpetu y la poderosa influencia del 'diluvio' que se lo llevó por delante, siendo la última victoria del año para el italiano Andrea Dovizioso, seguido de los españoles Rins y Espargaró (Pol), mientras que un meritorio Dani Pedrosa lograba el quinto puesto en la carrera de su despedida.

Pese a que el Mundial ya se decidió a su favor hace un mes en Japón, Márquez se negó a nadar y guardar la ropa bajo las lluvias torrenciales que han marcado a la decimonovena prueba del Mundial 2018. Fiel a su estilo voraz, el piloto de Cervera afrontó este cierre de temporada en el Gran Premio de la Comunidad Valenciana como si fuese la primera carrera de un año en el que ha logrado la friolera de nueve triunfos. Deseaba uno más, quería bailar bajo la lluvia, dar un recital de 'esquí acuático' ante noventa y siete mil ejemplares espectadores que aguantaban estoicos un histórico chaparrón. Por ello, el siete veces campeón mundial no estaba dispuesto a 'moderar' sus impulsos en un circuito Ricardo Tormo que obligaba casi a bucear y, en ocasiones, a ponerse el salvavidas, como atestiguan las 155 caídas que se produjeron durante el fin de semana en las tres categorías (récord del año).

Marc se negaba a la prudencia en la 'piscina asfaltada' de Cheste, sin recordar que el día anterior a la prueba, buscando la 'pole', ya había sufrido también otro accidente que le afectó aún más su maltrecho hombro izquierdo. No lo tuvo en cuenta, e incluso puede que se motivase mucho más al ver ganar por la mañana en Moto3 al piloto turco Can Öncü, que pese a ser invitado al Gran Premio se convirtió con sus 15 años, 3 meses y 20 días de vida en el más joven de todos los tiempos que gana una carrera. Márquez también quiso tener otro día histórico y, cuando peleaba por seguir las estelas de agua que dejaban los 'nadadores' Dovizioso y Rins, se fue al suelo por vigésimotercera vez en este año de su quinto triunfo en MotoGP, aunque no ha superado las 27 de 2017.

Marc, que ostenta el récord de caídas de 2018, acumula ya 170 en las diez temporadas que lleva en el Mundial. Lo suyo son grandes resultados en todos los sentidos, nadie le hace sombra ni yéndose al suelo. Eso sí, el diluvio le supera y Marc lo reconoce: "He fallado yo, porque el equipo me ha dicho que pusiera el blando y he sido yo el cabezón, esta vez no he acertado. Lo primero que he hecho al llegar al box ha sido pedir disculpas, porque ha sido mi error, pero intentaré no repetirlo de cara al futuro. Es ahí donde es importante para un piloto, seas quien seas, saber asimilar que has cometido un error y que ha sido tuyo, que no hay excusas". Tampoco tuvo su día el que ya es su compañero en Honda, Jorge Lorenzo, que en su última carrera con Ducati acabó decimosegundo, pensando ya sólo en estrenar la ansiada moto de Márquez este martes en Cheste y después también el 27 y 28 de noviembre en Jerez.

Dani Pedrosa, ayer en su última carrera en el Mundial de MotoGP. Dani Pedrosa, ayer en su última carrera en el Mundial de MotoGP.

Dani Pedrosa, ayer en su última carrera en el Mundial de MotoGP. / Repsol Media

Quien también tuvo un Gran Premio inolvidable fue Dani Pedrosa, que acabó quinto conteniendo la emoción en el día de su despedida. El formidable piloto español de 33 años, recientemente nombrado Leyenda de MotoGP, abandona la competición tras 18 intensas temporadas en las que logrado un brillante palmarés donde destacan tres subcampeonatos en la máxima cilindrada e idéntico número de terceros y cuatro cuartos puestos, además de 31 victorias en carreras (54 totales entre las tres categorías que ha competido), 40 segundos puestos y 41 terceros, con 112 podios de 215 grandes premios disputados. A todo ello hay que unir sus 49 'poles' y 64 vueltas rápidas, siendo el tercer piloto de la historia con más número de podios (153), en una clasificación que encabeza Rossi (232), seguido de Agostini (159).

Pedrosa expuso con naturalidad y sentimiento las emociones vividas en esta carrera que suponía su retirada: "Es muy extraño que haya sido la última vez. Pero por suerte he tenido un regalo extra, porque han sido dos carreras en lugar de una –hubo bandera roja por la intensidad de la lluvia, reanudándose para 14 vueltas finales-". Dani explicaba también que "es raro el hecho de que estos días todo el mundo dice palabras bonitas, aunque hubiese estado muy bien haberlas escuchado más a menudo, pero bueno. Cuando he acabado la carrera me he cruzado a muchos aficionados, también con personas que conozco desde hace mucho tiempo y me bastaba con ver sus miradas para comenzar a notar que se sentían un poco mal, porque toda esa gente que ha creído y confiado en mí piensan que no podrán verme ni soñar más conmigo. Soy muy emotivo, pero la verdad es que he aguantado bastante mejor de lo que pensaba".

Pedrosa, saludando a los aficionados y a los comisarios en Cheste. Pedrosa, saludando a los aficionados y a los comisarios en Cheste.

Pedrosa, saludando a los aficionados y a los comisarios en Cheste. / Repsol Media

Pedrosa, que será piloto probador de KTM, aclaraba lo que espera de su nueva vida: "No sé cómo va a ser. Ir en moto, aparte de eso no lo sé exactamente. El paso de ahora da más vértigo que cuando tenía 13 años. Me acuerdo que cuando tenía 13, 14, 15 años en la Copa Movistar y me dieron la oportunidad de ir al CEV y al Mundial, discutiendo con mi padre, él me decía: 'Haz un año más la Movistar o el CEV, que allí van muy rápido y eres muy pequeño'. Y recuerdo que no tenía ningún miedo de dar ese salto, pero ahora el salto es diferente por el hecho de que es tu pasión y la vas a vivir pero de otra manera, no con la competición".

Dani Pedrosa se va y el resto de pilotos del Mundial bajan también el telón hasta el próximo año en el que dirán lo mismo que el emperador Napoleón: “Vísteme despacio, que llevo prisa"...

Jesús Benítez, periodista y escritor, fue editor jefe del Diario Marca y, durante más de una década, siguió todos los grandes premios del Mundial de Motociclismo. A comienzos de los 90, ejerció varios años como jefe de prensa del Circuito de Jerez.

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