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Nino-Alfaro, el sustento de un equipo en auge

  • Oltra tiene ante sí el reto de mejorar sus números a domicilio si quiere ascender

El Tenerife se propuso este pasado verano un claro objetivo esta temporada: Volver a Primera División. Para ello estilizó el proyecto iniciado el año anterior de la mano de José Luis Oltra, un entrenador que campaña tras campaña mejora considerablemente el rendimiento del plantel.

La llegada de jugadores como el ex xerecista Luis García, el sevillano Alejandro Alfaro, el argentino Ezequiel Luna, Richi o el camerunés Kome han elevado el potencial de un equipo que de por sí ya contaba el pasado año con una plantilla altamente competitiva.

Pero para lograr el ascenso, el cuadro chicharrero y sobre todo su entrenador debe ser capaz de superar una meta sumergida, mejorar los números a domicilio.

Y es que desde que José Luis Oltra apareció en la Liga de Fútbol Profesional siempre ha tenido un debe en su currículo, obtener mejores resultados como visitante. En su primer año, en el banquillo del Ciudad de Murcia, Oltra sólo fue capaz de sumar 15 puntos a domicilio en toda la competición, una circunstancia que le impidió aspirar al ascenso pues hay que recordar que acabó cuarto.

En su segundo año, ya en el club tinerfeño, el técnico valenciano tampoco fue capaz de superar ese gran caballo de batalla y sólo consiguió 14 puntos en toda la Liga, un bagaje un poco escaso. Este año, por contra, el equipo chicharrero ya suma trece puntos y sólo llevamos 18 jornadas de competición, unos números que ponen de manifiesto que este Tenerife tiene muchos visos de optar a algo grande este año.

Deportivamente hablando, el Tenerife es un equipo sólido y al que se le atribuye la virtud de querer siempre jugar al fútbol. Oltra basa su juego en un ataque imponente, donde Nino y Alejandro Alfaron acumulan las tres cuartas partes de los goles de su equipo. Un detalle, los canarios son, junto a Xerez y Zaragoza, los equipos que más tantos han conseguido en Segunda, 32.

Además de ellos, el equipo chicharrero sabe tratar bien el balón, algo que viene unido al resurgimiento de Óscar Pérez, un jugador que cada vez se asemeja más a aquel que lideraba al Éibar de Mendilíbar hace unos años. Por él pasa todo el juego ofensivo del equipo.

lo mejor

La pegada de Nino y Alfaro, un dueto letal par jugar a la contra gracias a su rapidez.

lo peor

Los errores en defensa han privado al Tenerife de estar algo más arriba. 27 goles en 18 partidos son demasiados pues son equiparables a los equipos que luchan por evitar el descenso.

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