El que tanto tiempo estuviese el marcador sin moverse provocó como es lógico que la emoción no desapareciera del Navarro Flores hasta que el colegiado pitó el final y señaló el camino de los vestuarios. El encuentro fue, además de entretenido y muy deportivo en todos los aspectos, intenso y con ocasiones para ambas escuadras. Por supuesto no hay que restar al Rota méritos por su victoria, aunque tampoco nadie se hubiera extrañado de que Rota y Roteña acabaran el partido con reparto de puntos. Para que no faltase de nada el tanto de la victoria local tuvo su polémica, ya que en la acción inmediatamente anterior la Roteña pidió penalti por un presunto derribo a Álex Expósito.

La primera mitad fue magnífica y ya en el minuto 16 Castro tuvo una ocasión. A renglón seguido Falín se vio obligado a cometer falta sobre un Sebas que ya enfilaba la directa hacia la portería rival. Ya en el 38' de nuevo Sebas fue el protagonista, esta vez al cabecear fuera por poco. Poco antes Migueli había chutado al larguero. El partido ya estaba loco y a la media hora David Villalba obligó a Sergio a realizar un paradón. De aquí al final de la primera mitad la intensidad creció aún más todavía y se produjeron oportunidades de gol, incluso con un disparo a palo de Álex Expósito.

Tras el descanso la Roteña comenzó presionando, aunque el desarrollo de los segundos 45 minutos fue parecido al de los primeros. Ocasiones de gol para los dos equipos hubieron de sobra, La primera fue para Sebas (58'), mientras que en el 65 le tocó el turno a Álex Expósito. A continuación fue David Villalba el que replicó dos veces seguidas. Cuando ya parecía que el choque iba a acabar como empezó llegó la acción de posible penalti sobre Álex Expósito y posterior gol de un Sebas que aprovechó el servicio de David Villalba para marcar y llevar la alegría a los aficionados locales. Antes, en el 88', Antonio Niño chutó al larguero.Tras el 1-0 apenas quedó tiempo para más y como es lógico la exigua pero suficiente ventaja del Rota provocó la lógica dualidad en el estado de ánimo de las dos aficiones, que de todas maneras ofrecieron una clase magistral de comportamiento y deportividad a pesar de que se trató de un derbi competido y donde por no faltar también la polémica se dio cita.