El base español de los Minnesota Timberwolves, Ricky Rubio, se perderá el resto de temporada por las complicaciones surgidas por el esguince en el tobillo izquierdo que le impidió jugar al comienzo de la campaña, según informó el entrenador y General Manager del equipo, Flip Saunders.  "Pensamos que con lo que estábamos haciendo con él le aliviaría un poco, pero no es capaz de sentir alivio, así que queremos asegurarnos de que no le pase nada más", declaró ante los periodistas Saunders, que no quiso confirmar ni desmentir la posibilidad de cirugía si el dolor de Rubio persiste. "Dijimos cuando ocurrió que era un esguince de tobillo grave. No creo que nadie esperase este desenlace... Nuestros entrenadores están tratando de hacer algunas cosas diferentes para ver si pueden conseguir que no tenga dolor. Si no le desaparece, van a tener que mirar qué más pueden hacer", señaló.

El jugador catalán, de 24 años, se perdió 11 de los últimos 12 partidos de Minnesota por un dolor en el tobillo izquierdo, justo en el que sufrió un esguince a principios de esta temporada. La lesión, que se ocasionó el pasado 7 de noviembre en Orlando, costó a Rubio 42 partidos y fue el inicio de una serie de lesiones que azotaron al español.

En total, el de El Masnou ha jugado solo 22 partidos esta temporada, en los que ha promediado 10,3 puntos, 8,8 asistencias, 5,7 rebotes y 1,7 robos por encuentro. Así, Rubio se convierte en el tercer jugador de los Wolves (16-60), últimos de la Conferencia Este y ya fuera de los 'play-offs', en sufrir una dolencia de cara al final de temporada. El pívot montenegrino Nikola Pekovic se someterá a una cirugía en el tendón de Aquiles derecho la próxima semana, y el escolta Shabazz Muhammad afrontará una operación por la rotura del ligamento de uno de sus dedos.

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