El Recreativo Portuense sucumbió ante un mejor Arcos, superioridad especialmente notoria en la segunda parte, más aún en sus últimos quince minutos, donde se acabaría definiendo el choque.

El primer tanto mostró que no iba a ser un partido especialmente difícil para los arcenses: Caballero, libre de marca, registró todos los tiempos en su disparo, que se coló a media altura cuando sólo habían transcurrido seis minutos de juego.

Con todo, los recreativistas aprovecharon su opción en un penalti que Andrés se podría haber ahorrado sobre Barberá, quien, con frialdad, engañó a Isi Jareño estableciendo un empate que los arcenses no esperaban.

Con dominio visitante ante un Recre que aguantaba el tipo se llegó al descanso. La segunda parte sería la de la debacle recreativista, justo es recordarlo, ante un rival dos categorías por encima.

Los últimos quince minutos del choque resultaron letales para el Recreativo, cuya oposición concluyó cuando una gran asistencia de Bugatto a Maqui que permitía a este, tras driblar al portero en gesto de manual, colocar de nuevo en ventaja a los blancos.

Los de Juanjo Durán acusaron el golpe, más aún en el instante en que, tres minutos después, una bola llegaba a Cuenca después de varios rechaces y el futbolista, de tiro raso, aumentaba el marcador.

El Arcos, con el choque encarrilado, no mostró piedad hacia su rival y buscó el cuarto, que llegó con fortuna en un tiro de Germán Sierra que golpeó en la defensa local, despistando al guardameta.