El Unicaja busca dar la sorpresa definitiva en su semifinal contra el Barcelona, tras haber conseguido igualar el 2-0 adverso con el que llegó a Málaga y forzar un quinto y definitivo partido, aunque sabe de la dificultad de hacer realidad su sueño de alcanzar la final nueve años después.

Los de Joan Plaza, con el ánimo por las nubes tras haber empatado la serie con sus dos triunfos ante el Barcelona en el Martín Carpena, son conscientes de que deberán estar pletóricos en su rendimiento si quieren volver a luchar por el título, algo que no consiguen desde que en 2006 se proclamasen campeones.

El Palau Blaugrana será hoy (17:00) testigo del desenlace de esta eliminatoria, en un choque del que saldrá el rival del Real Madrid en la gran final. Unicaja y Barcelona disputarán su encuentro número 114 y el número 34 en la fase por el título, en la que los catalanes acumulan 24 triunfos y sólo nueve derrotas frente a los malagueños, aunque esa estadística es aún más aplastante en los partidos disputados por los barcelonistas como locales, con 17 triunfos en 20 partidos.

La última vez que los andaluces vencieron en la fase por el título al Barcelona en el Palau Blaugrana fue el 29 de abril de 2000 (57-67). Los otros dos triunfos datan de 1997 (93-99) y 1995 (77-84). Ahora, el Unicaja tiene la oportunidad de disputar la final nueve años después, cuando eliminó en la semifinal al Joventut (3-0).

No obstante, existen dos precedentes inmediatos muy negativos para los de Plaza, que cayeron en las dos primeras citas de esta serie de forma contundente en el Palau Blaugrana: 91-60 y 91-70.

Además, el Unicaja aterrizó en Barcelona con un jugador con problemas físicos, el base Jayson Granger, que el viernes tuvo que jugar infiltrado, aunque todo apunta a que finalmente podrá saltar a la cancha.