La Unión Deportiva Los Barrios ya tiene otra cara. El equipo de la Villa ha activado a toda potencia el modo salvación. Con Carlos Ríos a los mandos, la escuadra barreña protagoniza una segunda vuelta con diez puntos de quince jugados, un promedio de dos por partido que ha permitido a los gualdiverdes reducir su abismo con la permanencia de diez a sólo dos puntos.

La Unión ha comenzado 2018 con unos números propios de un aspirante a la fase de ascenso. Los barreños son el tercer mejor equipo del grupo X de Tercera en el nuevo año, junto al Cádiz B y el Castilleja, sólo superados por el Gerena y el Ceuta.

El proyecto respaldado por Pablo Dana y Manolo Hierro ha apostado fuerte con los refuerzos

Los de Carlos Ríos suman en este periodo un punto más que el Algeciras, el segundo de la tabla, y nueve más que su próximo rival, el Guadalcacín, ahora en un bache y el penúltimo.

Desde que perdió con una abultada goleada en Castilleja en su debut, Ríos ha hecho despegar a la remozada Unión con una plantilla prácticamente distinta con respecto a la que echó a rodar en verano. Cuatro jornadas seguidas sin conocer la derrota y apenas un tanto en contra aliñan los diez puntos que los gualdiverdes han conseguido para avivar su caldera de la ilusión.

El sanluqueño Carlos Ríos se embarcó en Los Barrios con un conjunto que terminó la primera vuelta con trece puntos, a nueve de la salvación. Después del golpetazo en Castilleja, la Unión se rezagó hasta los diez. Ese abismo ha quedado reducido a dos puntos y los barreños ya tienen a tiro, por fin, a sus dos rivales más inmediatos en la clasificación.

El duelo del domingo en el campo jerezano del Guadalcacín (12:00) es la primera posibilidad que tiene la Unión para abandonar el farolillo rojo. Los gualdiverdes podrían salir del descenso si acompañan los resultados del Castilleja y el Onubense.

El cambio radical en cuanto al rendimiento es drástico en un conjunto que apenas promedió 0,6 puntos durante la primera vuelta y que ahora ha elevado sus prestaciones a dos.

El auge de la Unión ha llegado de la mano del apoyo del grupo inversor Heritage Sports que encabeza el italo-suizo Pablo Dana, tutelado in situ por el malagueño Manolo Hierro como nuevo director deportivo. Los dos resposanbles subrayaron en su puesta en escena en la Villa que la prioridad de su proyecto pasa por lograr la salvación, un desafío para el que no se han escatimado esfuerzos en el recién clausurado mercado invernal.