El Real Madrid evidenció en su debut liguero su falta de frescura al arrancar el curso con una derrota en casa ante un Valencia Básket más entonado, en el que destacaron Hamilton y Dubljevic, con 26 y 21 puntos, respectivamente.

Tras unos primeros minutos de tanteo, con mínimas rentas para los madrileños, un parcial de 8-0 que culminó Ayón estableció las primeras ventajas claras para los locales, que parecían arrancar más metidos en el choque.

La conexión entre el pívot mexicano -con diez puntos en el primer cuarto- y Sergio Llull dio sus frutos, aunque el Valencia siguió al acecho y logró acercarse al final de los primeros diez minutos (20-17) tras un parcial de 2-8 a su favor.

Un preocupante apagón anotador de los de Pablo Laso que duró tres minutos y medio empezó a otorgar pronto las primeras ventajas a los levantinos, con Dubljevic y Hamilton como destacados referentes ofensivos. Así, el vigente campeón pagó su falta de frescura y de ideas en ataque, con un solo triple de nueve intentos en los primeros 20 minutos. Aunque se llegó a acercar a dos puntos, sendos triples de Dubljevic y Stefansson dejaron la diferencia en ocho al descanso (37-45).

En un minuto y medio de la reanudación el Madrid endosó a su rival un 7-0 que lo metía de lleno en el choque, aunque los de Pedro Martínez, con triples de Rafa Martínez y Vives, volvían a respirar poco después.

Hamilton siguió haciendo daño desde todas las posiciones. Un mate suyo situó en diez la diferencia y obligó a los anfitriones a apretar los dientes en defensa para remontar hasta volver a ponerse por delante tras un parcial de 14-2.

Tras muchos minutos por delante en el marcador, los valencianos no querían tirar por la borda el trabajo realizado y salieron más inspirados al último acto, aunque la historia se repetía y el Madrid volvía a tomar la delantera a tres del final. Sin embargo, en los momentos decisivos la inspiración volvió al equipo visitante, que supo jugar mejor sus posesiones para apuntalar un esperanzador triunfo ante el defensor del título.