La UD Roteña se llevó los puntos gracias a un oportunista Salva que no perdonó cuando tuvo sus oportunidades ante un Pastores que sigue jugando bien pero malgastando sus oportunidades.

La Roteña balón frenó las tímidas embestidas de los locales, que trabajaron bien en el centro del campo y se hicieron con el primer cuarto de hora del partido. En el primer acercamiento roteño llegó el primer gol. Un balón lanzado a unos metros del área impacta en la mano de uno de los muchos defensas que se encontraba en su trayectoria. Pena máxima y máximo castigo para un Pastores que empezó por detrás en el marcador aún estando mejor que su rival.

Cuando el Pastores parecía cansado y el partido mucho más equilibrado, llegó una jugada clave. Descuento del primer tiempo y el árbitro decretó penalti por manos, tan riguroso como el primero. Rubio no pudo engañar al portero y los blanquiazules se van a la caseta por detrás.

El Pastores reaccionó en la segunda mitad y obtuvo su premio, tal vez cuando menos lo merecía. Diego pone la pelota casi en la escuadra derecha del meta visitante Bravo y el empate en el casillero.

La Roteña, en una de las pocas veces que llega con claridad al área local, lo aprovechó. Salva bate por segunda vez a Fermín. Ganó quien mejor estuvo de cara a puerta.

Los locales volvieron a hacerse con el partido pero la Roteña se defendió bien. Juanito y Rubio, los más adelantados, reciben demasiado lejos de la zona de peligro y tienen que recorrer demasiado campo. Ya en el descuento y a la desesperada el juvenil y debutante Prince ganó en el borde la partida por alto al meta Bravo y logró rematar, pero un defensa consigue salvar el empate.