Edu Villegas, guardameta del Xerez Deportivo FC, es uno de los azulinos más apasionados de la plantilla y de los más queridos por la afición tanto por su trayectoria como por su comportamiento dentro y fuera del campo. Casi una semana después de firmar el ascenso en Chapín frente al Puerto Real ante su público, aún sigue disfrutando de una jornada inolvidable para él.

El portero azulino reconoce que le ha quedado "un recuerdo muy sentimental. Ya son tres años aquí, con tres ascensos consecutivos. Tres temporadas con la misma meta y consiguiendo el objetivo, que no es otro que llevar este club donde se merece. Cada día que pasa se quiere más a este club y después de muchas horas de vuelo, de muchos partidos, de muchos viajes, se va haciendo mucho más fuerte este sentimiento".

"Desde el calentamiento -añade el xerecista- se notaba el gran ambiente en la grada, la gente estaba feliz y después del partido fue tremendo. El ascenso fue muy bonito y se vivió un gran ambiente. El xerecismo vivió un día inolvidable. El cartel del partido lo decía todo, resurrección del xerecismo, a mí me encantó, era impactante y creo que consiguió lo que se pretendía. Este club es de la afición y respetamos muchísimo a nuestros seguidores".

A pesar de haber alcanzado ya el ascenso a División de Honor, Edu entiende que todavía el trabajo no ha finalizado, pues "este equipo está llamado a ganar todos los partidos. Aquí no nos vamos a quitar la vitola de campeones ni de favoritos. Esto es el Xerez Deportivo con una masa social importante que respalda a la que hay que responderle. Creo que somos el primer equipo que hemos quedado campeón a nivel nacional, pero hay que seguir dando ejemplo allá donde vayamos tanto en el ámbito profesional como en cuanto a los resultados. Quedan seis partidos que los afrontaremos con la misma profesionalidad y entrenaremos con la misma intensidad".

Villegas, pese a sus cuarenta años cumplidos, se encuentra en un magnífico estado de forma y no se plantea aún colgar las botas, todo lo contrario, piensa que le queda cuerda para rato. Su ilusión es la de llegar con el equipo a Tercera División, que fue el objetivo por el que se unió a este proyecto desde su nacimiento.

En ese sentido, puntualiza: "Soy muy exigente conmigo mismo y siempre he dicho que me retiraría en el momento que considerara que no tenía que continuar en la portería, pero me encuentro en condiciones óptimas y al 100% mental, física y psíquicamente. Estoy muy bien de forma, de técnica, de reflejos, de velocidad. Puedo gustar más o menos como portero pero tengo ganas de seguir, de entrenar y de mejorar a pesar de la edad. Creo que la portería del Xerez Deportivo está hipercubierta con Iván Ares y conmigo. Siento el cariño de la afición y de la directiva por lo que voy a seguir siendo el portero del Xerez".