El centrocampista del Barcelona Xavi Hernández, que padece una pequeña rotura fibrilar en el sóleo de la pierna izquierda que le impedirá jugar el próximo sábado en Son Moix, espera reaparecer en Mestalla la siguiente jornada (2 de marzo). "No debe haber problemas para que pueda estar ante el Valencia. Es una lesión pequeña, de poco importancia, y no hay motivo para alarmarse", declaró ayer Xavi en rueda de prensa.

El centrocampista azulgrana ya jugó la pasada temporada con una rotura de tres centímetros en el sóleo. Sin embargo, aunque en esta ocasión se trata de una lesión menor, cree que no hay motivo para forzar como entonces. "El año pasado nos jugábamos la Liga en aquellos partidos, yo me sentía bien, hablamos con los doctores y decidí jugar. Ahora ya veremos, aún queda mucha temporada, y hay que ver con qué sensaciones me levanto cada mañana, pero creo que no habrá problema para estar en Valencia", señaló. Preguntado por el momento por el que atraviesa el equipo, Xavi no comporte "para nada" la opinión de quienes piensan que el Barça está atravesando por un bajón de juego: "Si lo analizas sin fanatismos y sin mirar los colores, el Barcelona anda bien, juega bien al fútbol, domina, tiene la posesión del balón y crea muchas ocasiones, que unas veces entran y otras no. Así que estamos tranquilos".

Pese a las buenas sensaciones que el Barça dejó en el Emirates, el azulgrana cree que levantar el 2-1 de la ida en el Camp Nou va a ser complicado. "Aquí supongo que jugarán más defensivos y me imagino que no va a ser fácil, porque el Arsenal tiene muy buenos jugadores arriba para jugar al contraataque", finalizó.

Precisamente, el equipo londinense, que ayer jugó y ganó ante el Stoke City un encuentro de la Premier (1-0), pudo perder ayer a su capitán, Cesc Fábregas, después de que éste se marchase lesionado en el minuto 14 de partido. Cesc tuvo que ser sustituido después de estar varios minutos con gestos de dolor sobre el césped del Emirates Stadium, lo que llevó la preocupación al estadio.

Cesc dejó su puesto al ruso Andréi Arshavin y, cariacontecido pese a la ovación que le dedicó su afición, se marchó directamente a los vestuarios, donde le realizaron la primera exploración para confirmar su lesión. En principio, el capitán del Arsenal sufrió un problemas muscular, aunque hasta hoy no se sabrá el alcance.