La situación de inestabilidad que vive el Deportivo se ha transmitido poco a poco al mercado de fichajes de la Segunda División. Hasta el momento los movimientos en los equipos no han sido demasiados, pero el proceso de compraventa y el vacío de poder del Xerez no ayuda a la contratación de futbolistas.

Lo peor es que el tiempo va pasando y ni siquiera las renovaciones se han podido llevar a cabo. Lo que más preocupa a la entidad es el caso de Yordi. El isleño ha declarado por activa y por pasiva su intención de quedarse en el club azulino, pero las continuas llamadas de equipos de Segunda División y las suculentas ofertas que algunos les están presentando complican su renovación.

Además, el Pichichi de Segunda confía en que el club le mejore la oferta realizada principalmente en cuanto al número de años (le dan uno más otro opcional y quiere dos), sin lugar a dudas uno de los grandes escollos de su posible renovación.

En el mismo caso se encuentra Antoñito. El sevillano tiene cosas importantes pero también ha dejado claro en las últimas semanas que aquí en Jerez está muy a gusto, con el equipo y con la afición, por eso sigue a la espera. Sin embargo, el del Polígono de San Pablo ya ha comunicado a sus agentes que aceleren las gestiones con otros clubes si la operación de compraventa no se lleva a cabo en esta semana.

Toda esta demora en el traspaso de poderes trae en jaque a Esteban Vigo. El malagueño, que a día de hoy cuenta con solamente quince futbolistas en la primera plantilla, ha hablado en los últimos días con ambos jugadores, reiterando su intención de contar con ellos para la próxima temporada. Con Yordi dialogó hace dos días y le insistió en que es parte fundamental de su proyecto, mientras que con Antoñito lo hizo durante la jornada de ayer para transmitirle su confianza.

Entre hoy y el viernes puede haber novedades importantes, pues en el club comienzan a plantearse ya el hecho de elevar diferentes ofertas a los jugadores que han cumplido contrato y a los que se pretende renovar.