El Atlético Zabal, a través de su presidente, Francis Trujillo, contestó ayer al Atlético Sanluqueño acusando a los verdiblancos de los incidentes que se produjeron al final del partido que el líder de la Preferente Juvenil jugó en La Línea y que acabó con varias lunas rotas en el microbús que transportó al Sanluqueño. Francis Trujillo lamentó los hechos y ofreció su versión a este periódico. "Nadie del Zabal tuvo que ver con lo que allí ocurrió. Todo empezó cuando un jugador del Sanluqueño marcó un gol y se fue a celebrarlo hacia un grupo de gente ajena al club, se fue tocándose sus partes y haciendo cortes de manga", afirmó el dirigente del club linense.

"Después hubo insultos y provocaciones pero esos niñatos no tienen nada que ver con el Atlético Zabal", subrayó. "También hay que decir que de camino a los vestuarios un jugador del Sanluqueño rompió de una patada la cerradura de la puerta, que dieron un empujón a un señor mayor que estaba por allí y a un niño, incluso agredieron a un directivo de esta casa", agregó el presidente. "En el acta quedó todo reflejado y pitó un colegiado de nivel como Checa Montero", matizó Trujillo. "Insisto en que estos incidentes fueron entre ellos y gente ajena el club", sentenció.