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Los azulinos se juegan su futuro en apenas cinco días

El Xerez Deportivo se juega su ser o no ser en sólo cinco días, justo los que restan para que arranque la competición en Primera Andaluza el próximo fin de semana. Apenas una semana es el tiempo que le queda para saldar las deudas con los exjugadores José Vega, Toni Lechuga, Manuel Ruz y los técnicos de la pasada campaña que han denunciado. Si no lo hace, la Andaluza no le tramitará las licencias y no podrá competir. Aún así, la Federación no le excluiría de la competición hasta transcurridas dos jornadas tras incurrir en dos incomparecencias. El resto de equipos de la entidad, evidentemente, tampoco podrían salir a competir.

Ante ese negro panorama, las gestiones se han intensificado desde el club para intentar buscar ayudas, unas ayudas que podrían llegar sobre la campana. El principal escollo es el de los jugadores que, molestos por las declaraciones de Pedro Marín, decidieron romper las negociaciones.

Mientras, la primera plantilla, a la que ya comunicaron la pasada semana miembros de la Gestora que el club competiría, terminará de perfilar su puesta a punto en el Trofeo de Feria de Guadalcacín, un triangular fijado para el miércoles y en el que competirá junto al club anfitrión y el Industrial de José Antonio Luna.

Los xerecistas, tras no disputar el pasado sábado el partido que en un principio iban a jugar en Paterna frente al Rivera, regresan esta misma tarde a los entrenamientos en La Granja. Si al final compite, arrancará la Liga el próximo sábado, a las siete de la tarde, ante la Balona B en La Línea.

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