Después de la presentación de la Liga Endesa en la sede del patrocinador que pone el nombre a la competición, los máximos dirigentes de los 18 clubes que componen la ACB celebraron una importante asamblea en la que aprobaron la ruta a seguir para reducir la competición a 16 equipos en dos años.

Al final la presión de los conjuntos con licencia A de Euroliga se impuso, con el apoyo del Consejo Superior de Deportes, para acordar la ruta de transición hacía una competición con 16 participantes en la campaña 2019-2020. Para hacerlo se han aprobado dos descensos y un solo ascenso los dos próximos ejercicios. A partir de entonces sólo habría un ascenso y un descenso, pero ahora el acuerdo debe ser trasladado al Consejo Superior de Deportes y a la Federación Española de Baloncesto (FEB) con el objetivo de alcanzar un entente global antes de que las ligas avancen. Habrá que ver las compensaciones, en caso de que acepten, que logran los conjuntos de LEB Oro, ya que en verano se negaron tajantemente a la reducción de los ascensos, menos ahora que las condiciones económicas para subir de categoría son mucho más asequibles y se mantendrán varios años.

Durante la reunión se decidió crear una comisión que en las próximas semanas presente el "perfil, proceso y metodología para escoger una nueva presidencia de la Asociación", tras la anunciada decisión hace semanas de Francisco Roca de dejar el cargo próximamente.