Vela

Entre la desilusión y las esperanzas

  • Trujillo falla en 'Finn' y Marina Alabáu debuta bien en 'RX:2'

El debut de las clases 470, tanto masculino como femenino, y de las tablas a vela RS:X, también en las dos categorías, dejó un buen sabor de boca en la tercera jornada de la competición de vela de los Juegos de Pekín, mientras que Trujillo en Finn se hunde en la clasificación y en el 49er se complica la medalla.

Trujillo no estuvo acertado en sus decisiones. Todos los roles de viento le pillaron mal situado y nunca tuvo la inspiración necesaria para salir del atolladero. El metal parece ya alejarse definitivamente.

La sevillana Marina Alabáu, por su parte, quiso demostrar en su debut que es una clara aspirante a colgarse uno de los metales y con un tercer y un quinto demostró que está preparada. Marina se situó tercera a poco de tomar la salida en su primer recorrido a la estela de la china Jian Yin, intratable, y de la australiana Jessica Crisp, situación que logró mantener sin mayores complicaciones durante el resto de la prueba, aunque sin opciones de alcanzar a sus dos rivales.

En la segunda serie mantuvo sus expectativas, aunque en esta ocasión tocó sufrir al no estar bien situada tras los primeros compases de la manga. Sufrió en la última parte pero, finalmente, recuperó hasta el quinto lugar, lo que la sitúa en esa misma posición en la general que domina con mano de hierro la china Jian Yin.

Iván Pastor tuvo un buen debut pese a que tuvo problemas con sus antebrazos, por lo que no pudo remar todo como le hubiera gustado. Su octavo puesto en el inicio, sin ser un resultado para el éxtasis, sí da paso a la esperanza de que pueda luchar por uno de los primeros puestos.

En el 49er Iker Martínez y Xabier Fernández sufrieron un duro varapalo cuando en la segunda regata de la jornada fueron descalificados por un fuera de línea de la salida que les hace sumar 20 puntos. Arriesgaron en la salida y perdieron. Un fuera de línea del que no se dieron cuenta hasta que fue tarde. La tercera regata del día, sexta de la clase, se convirtió para los españoles en un examen para sus opciones y de su fortaleza mental. Decidieron no arriesgar en la salida, lo que les llevó a terminar quintos, el mismo lugar que ocupan en la general. Prometen lucha por lo que si bien el oro parece ya un sueño, otro de los metales sí puede estar todavía a su alcance.

Los canarios Onán Barreiros y Aarón Sarmiento, en el 470 masculino, dejaron una muy buena sensación. Su quinto puesto en la primera regata y, sobre todo, el segundo en la siguiente, refuerza la creencia que puede ser el equipo encargado de dar la sorpresa en estos Juegos.

Las españolas se mantuvieron tranquilas en la primera prueba. Sextas tras el primer tramo, mantuvieron una cerrada lucha en los parciales siguientes con varias rivales para, al final terminar en un gran cuarto puesto.

En la segunda serie, más tranquilas tras comprobar que podían estar ahí, estuvieron atentas a cuantos roles de viento adornaron el campo de regatas, volviéndole casi imprevisible. Natalia y Laia, que volvieron a la vela olímpica tras su aventura con la vela de crucero, eran una incógnita en cuanto a su rendimiento, aunque la calidad de la patrona española siempre es una garantía.

En Yngling, Mónica y Sandra Azón y Graciela Pisonero tuvieron un inicio de jornada aciago. Decimocuartas en la primera y cuartas en la segundas hablan de una irregularidad que les han dejado sin opciones.

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