El valor de las estrellas volvió a ponerse de manifiesto en los respectivos triunfos que consiguieron Los Angeles Lakers y los Celtics de Boston en la jornada de cuartos de final de la NBA, mientras que los Sixers de Filadelfia lograron el triunfo gracias a la labor de equipo y la ausencia del base Derrick Rose en los Bulls.

Los Lakers volvieron a demostrar que sin las genialidades y aciertos anotadores de Kobe Bryant, las buenas aportaciones de Bynum y Gasol no hubiesen ganado por 104-100 a los Nuggets de Denver en el segundo partido de la eliminatoria que dominan por 2-0.

Bryant anotó 38 puntos, incluidos los dos últimos, que fueron los que hicieron la diferencia final en el marcador ante unos Nuggets, que como equipo jugaron mejor baloncesto que los Lakers. Junto a Bryant, el poder de Bynum que aportó 27 puntos y nueve rebotes quedó demostrado de nuevo, 48 horas después de haber logrado en el partido inaugural de la serie un triple-doble. Gasol consiguió 13 puntos, 10 rebotes y cinco asistencias.

Más decisiva fue aun la aportación del veterano alero Paul Pierce en el triunfo a domicilio por 80-87 que lograron los Celtics antes los Hawks de Atlanta y que les permitió recuperar la ventaja de campo y empatar a 1-1 la serie de cuartos de final en la Conferencia Este. Pierce, que disputó 44 minutos, aportó 36 puntos, incluidos 13 en el cuarto periodo, cuando los Celtics completaron la remontada con un parcial de 14-26, y capturó 14 rebotes.

El veterano alero volvió a ser la primera y única opción del ataque de los Celtics que llegaron al partido con las ausencias importantes de los titulares, el base Rajon Rondo -suspendido con un encuentro- y el escolta Ray Allen, lesionado. Pierce anotó 12 de 26 tiros de campo, acertó 1 de 5 intentos de triples, pero logró 11 de 13 tiros de personal, repartió cuatro asistencias, pero tuvo ocho pérdidas de balón.

El base Jrue Holiday y el escolta reserva Lou Williams dirigieron el ataque de los Sixers que vencieron a domicilio por 92-109 a los Bulls, sin Rose en el campo, aunque sí estuvo en el banquillo.

La ausencia de Rose, baja entres seis y nueve meses al sufrir la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda en el primer partido de la eliminatoria, dejó tocados a los Bulls tanto en su juego como en el ánimo y aunque llegaron al descanso con la ventaja parcial de 55-47, en el tercer periodos (14-36) sucumbieron. Holiday, que anotó 26 puntos, fue el gran verdugo de los Bulls al encestar 11 de 15 tiros de campo. Junto a Williams, que aportó 20 puntos, rompieron a la defensa de los Bulls en el tercer periodo y por ahí comenzó la remontada que les permite quedarse con la ventaja de campo.