El Comité de Competición de la Gaditana ha sancionado de forma cautelar a los jugadores del Estella Casqueiro, Iván García, Sergio Romero, Iván Montero y José Manuel Ramírez y a los del Recreativo Portuense José Luis Robles y Adrián Colorado hasta que no se resuelva el expediente abierto tras los incidentes que se produjeron en el encuentro del pasado domingo suspendido en el minuto 89 con el resultado de 3-1 a favor de los locales.

De momento, Competición abre un plazo de tres días para que ambos clubes puedan presentar sus alegaciones a un acta que relata unos incidentes gravísimos, con pelea tumultuaria entre jugadores de uno y otro equipo e invasión de campo, amén de una agresión sufrida por el colegiado, Manuel Herrera, quien además recibió fortísimos insultos, acciones que a buen seguro serán tenidas en cuenta por el Comité para castigar duramente a los implicados.

Con el país aún azorado por la violencia de los ultras, el pasado domingo se vivió un nuevo episodio en un campo de fútbol. Fue en El Juncal de El Puerto de Santa María. El colegiado suspendió el encuentro a raíz de una tumultuaria pelea que se originó tras el 3-1 local en la que se vieron implicados cinco jugadores del Estella, dos futbolistas del Recreativo Portuense y también aficionados que saltaron al terreno de juego para participar en la trifulca.

El contenido del acta expone un escenario más propio de un combate bélico que de una actividad deportiva. En uno de sus pasajes, el árbitro explica cómo el futbolista del Estella Sergio Romero se hallaba en el suelo -indefenso- mientras recibía pisotones y patadas del jugador local José Luis Robles.

Todo se origina cuando el equipo local culmina su remontada del 0-1 al 3-1 y el autor del tercer tanto, Adrián Colorado, lo celebra de manera efusiva ante el meta visitante Casqueiro y el defensa Iván García. Los ánimos ya estaban caldeados de antemano porque al Estella le habían anulado dos goles y porque el árbitro paró el partido en una contra visitante al estar un futbolista del Recreativo Portuense en el suelo. Según la versión del presidente del equipo jerezano, Nico Brenes, el tercer gol llega en una jugada similar en la que el colegiado no para el partido estando un jugador del Estella caído. Además, explica que durante el partido varios aficionados se situaron detrás de la meta defendida por Casqueiro "insultándolo y tirándole cosas y el árbitro en lugar de ordenar al delegado que desalojara esa zona amonestó a mi jugador". Tras el 3-1 y la celebración del jugador local se lió la marimorena porque, según el acta de Manuel Herrera Ruiz, el meta Casqueiro intenta dar una patada al goleador local y el defensa Iván García le propina un puñetazo en la cara y una patada en la pierna.

Si graves son estos incidentes, no lo son menos los que relata Herrera Ruiz a continuación, denunciando insultos, intentos de agresión; y la agresión de una persona que no constaba en el acta -se encontraba en la grada- y que más tarde identifica como jugador del Estella. De este último refleja insultos gravísimos y golpes.

Tras el partido, el colegiado se personó en la comisaría de la Policía Nacional para presentar denuncia adjuntando parte de lesiones aunque finalmente lo hizo en Ubrique el día 9.

El presidente del Estella, Nico Brenes, ofreció también la versión de su club, argumentando que en la redacción del acta hay mucho de invención: "En lo único que dice la verdad el árbitro es en el inicio de los altercados. Y el que marca el 3-1 se pone delante de mi jugador y del portero y celebra efusivamente el gol. Ahí es verdad que le da pero a renglón seguido Casque (Casqueiro, el portero) intenta separar, en ningún momento agrede, y es cuando se produce la invasión de campo. Algunos jugadores de mi equipo intentan defenderse y la mayoría se quita de en medio. Lo que ocurrió fue lamentable, y no sé qué voy a hacer. Si no presento alegaciones parece que estamos dando la razón al árbitro, qué casualidad que sólo vio a mis jugadores y no a los del Portuense. A un jugador de mi equipo le tiraron al suelo y empezaron a darle patadas por todos sitios".

Respecto al jugador de calle acusado de agredir al árbitro señala que "es verdad que le dijo algo y que le acusó de tener la culpa de lo sucedido pero en ningún momento agrede al árbitro, eso de que le da un empujón es mentira. Pero qué hacemos, no tenemos vídeo de lo sucedido y es su palabra contra la nuestra. Lo peor es que al chaval lo ha denunciado".

De cualquier forma, Brenes apunta que "esto no se puede repetir más, no podemos defender este tipo de actuaciones. En los campos hay que aguantar muchas cosas y es verdad que todo comienza con la agresión de mi jugador al que hizo el 3-1 pero luego de todo lo que escrito es falso. Nosotros salimos escoltados por la Policía Nacional porque los que la liaron seguían allí. Lo peor es la imagen que va a quedar del Estella", lamenta.