El Espanyol igualó ayer su mejor racha de partidos sin conocer la derrota en Liga, doce, al ganar por la mínima a un triste Levante (1-0), aunque el juego del conjunto barcelonés no estuvo, ni mucho menos, a la altura de tan destacable logro.
El Levante demostró por qué ahora mismo es el colista de Primera y no ha sumado ni un sólo punto en sus desplazamientos, y el Espanyol confirmó que se le atragantan las visitas de rivales hundidos en la parte baja de la tabla que juegan muy poco y dejan jugar aún menos.
Y eso que el choque empezó con un gol temprano de Jarque quien, a los 9 minutos, adelantó a su equipo (1-0) en un doble remate -primero de cabeza y luego con la zurda tras el rechace de un Storari ya batido- tras un centro por la derecha de Moha.
Al final, el Espanyol se acostó otra vez en puestos de Liga de Campeones e igualó su récord de imbatibilidad en el campeonato liguero.
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