El piloto español Fernando Alonso (Renault) compareció anoche ante algunos medios de comunicación para lanzar un mensaje muy conservador, ya que ha insistido en que su coche no está preparado, a tres semanas del inicio del mundial de la F1, para competir por el podio.

Además, el bicampeón español ha insistido en que no tiene una "bola mágica" para adivinar el futuro y que, por lo tanto, no sabe qué expectativas tiene su coche ante los que cree que son ahora mismo los candidatos para luchar por el triunfo.

"¿Dónde estamos? Bastante atrás. No estamos en condiciones de hacer nada contra McLaren, Ferrari o BMW. Nuestro nivel está en el grupo de Williams y Red Bull. Pero todo cambia muy rápidamente. Ferrari es favorito, pero no está en otro mundo", señaló el piloto asturiano, para quien BMW es la escudería que más le ha impresionado. "Van muy rápidos. No han enseñado sus cartas. Corren con el depósito lleno y hacen muy buenos tiempos".

Con vistas a la primera prueba del Mundial, que se celebrará en Australia, Alonso ha informado de que su bólido "no presentará nada revolucionario", aunque ha destacado que en los próximos entrenamientos Renault realizará algunas modificaciones en el frontal para ganar algunas décimas. Ante esta expectativa, dado que Alonso lleva tres años al máximo nivel, periodo en el que ha obtenido dos mundiales, el joven piloto recordó que en la Fórmula Uno se dan situaciones de cambios radicales. "En este deporte pasan situaciones tan inesperadas como pasar a ser un piloto del montón", destacó.

"Este año Renault ha dado un salto altísimo. Se piense en estar entre el séptimo puesto, cuando el año pasado acabaron muy mal. Pero Michael Schumacher ganó dos mundiales con Benetton y se tiró cinco temporadas sin ganar nada con Ferrari. Esto es lo que tiene la F-1", razonó.

A pesar del futuro a corto plazo que describió el joven piloto, el bicampeón del mundo no pierde la esperanza de que su equipo consiga notables mejoras durante la temporada y que él pueda sacar el máximo a su vehículo, aunque insistió en que ahora "es un sueño pensar en el podio". "Yo sí que sabía que estaríamos donde nos encontramos cuando fiché por Renault", destacó.

Finalmente, Fernando Alonso se refirió a los incidentes que se originaron en el trazado catalán hace unas semanas, cuando algunas actuaciones de seguidores en la tribuna fueron tachadas de racistas contra el piloto británico Lewis Hamilton (McLaren).

"Este no es un país racista. Se dan casos aislados. Y cuando menos se hable de ello, mejor. Había gente disfrazada en el carnaval y mira la que se montó. A mí me llamaron perro y nadie salió en mi apoyo. No creo que se necesite la campaña antirracista que quiere organizar la FIA a partir del gran premio de Barcelona", sentenció.