En el fútbol, como en la vida, siempre hubo clases. Las sigue habiendo, aunque el desigual reparto televisivo está creando una abismal separación entre los dos tiranos poderosos y la plebe, en otro reflejo de la crisis. Aun así, continúan existiendo equipos que perseveran en conservar su estatus burgués. Tres de ellos se han relanzado desde sus respectivos cambios de entrenador: Espanyol, Valencia y Sevilla. Los tres figuran entre los seis primeros de la hipotética clasificación del año 2013.

Entre los seis mejores

Si sólo se atendiera a las cinco jornadas disputadas en 2013, la tabla sería algo distinta. Los seis primeros acumulan los mismos puntos, 10, las mismas victorias, 3, los mismos empates, uno, y las mismas derrotas, también una. Sólo la diferencia de goles hace que siga mandando el Barcelona, por delante de Madrid, Sevilla, Atlético, Valencia y Espanyol.

Estos tres clubes han agradecido el cambio de entrenador. Llama la atención el caso del Espanyol. Pese a la tremenda crisis general, el club barcelonés no tuvo más remedio que destituir a Mauricio Pochettino en la jornada 13. El argentino no había podido impedir que la desarticulación paulatina de la plantilla blanquiazul tuviera reflejo en la tabla y su equipo era colista, con sólo 9 puntos. Javier Aguirre lo sustituyó y su debut le dio al Espanyol un empate en Los Cármenes. Desde entonces ha hecho crecer a su equipo hasta dejarlo en una posición de alivio, dejando el descenso a cinco puntos.

El caso del Valencia es distinto. Otro Mauricio, Pellegrino, no volvió con buen pie a Mestalla. Con una plantilla casi similar a la que fue tercera con Emery, el argentino estaba desplomándose en la tabla hasta que Ernesto Valverde se hizo con las riendas, con el equipo duodécimo y sólo 18 puntos en la jornada 14. El efecto fue casi inmediato. El Valencia es sexto.

El Sevilla tardó más en reaccionar, pero los 22 puntos que sumó Míchel en la primera vuelta llevaron a Emery a Nervión. Dos triunfos y un empate fuera en Liga, meter al equipo en las semifinales de Copa y dejarlo a un paso, aunque difícil, de la final es su bagaje. Ha devuelto la ilusión al sevillismo.

El Madrid claudica en el sur

Otro cambio de entrenador que ha tenido un efecto inmediato ha sido el de Lucas Alcaraz en Los Cármenes. El granadino fue profeta en su tierra con el debut triunfal ante el Real Madrid y, de paso, confirmó la tendencia de esta Liga: el equipo de Mourinho perdió en todas las plazas del sur, tras las derrotas ante Sevilla, Betis y Málaga. El Barça, en cambio, pasa apuros en Andalucía, pero donde va gana.