Con manido dicho, 'Año nuevo, vida nueva', afronta la plantilla del Deportivo su primer encuentro de 2010. Los azulinos viajan a Almería con la única consigna de ganar y revertir de esta forma una situación complicada.

Emilio Viqueira, uno de los protagonistas, aseguraba ayer que la intención es "cambiar la dinámica que llevamos. Vamos a Almería con mucha ilusión y con las ganas de demostrar cosas en el campo, no nos vale decirlo de boquilla, el objetivo es sacar un resultado positivo".

Para el gallego, el estreno de Lillo en el banquillo almeriense "es una anécdota, no creo que con seis días que ha tenido de entrenamiento vaya a cambiar muchas cosas. Lo que ocurre es cuando llega un entrenador nuevo los futbolistas están un poco más atentos. Nosotros debemos ir a lo nuestro y hacer más o menos lo que hicimos en el partido ante el Santander aunque corrigiendo algunas cosas. Esa es la dinámica a seguir".

En la misma línea del centrocampista se pronunciaba el canario Momo. El zurdo, que por segunda jornada consecutiva será titular, resaltó que el duelo de esta tarde "es importantísimo y difícil, porque nos vamos a enfrentar a un rival que está en una situación complicada".

Pese a todo, Momo entiende que "se puede hacerles daño, debemos aprovechar las necesidades que tienen y tratar de sumar la primera victoria fuera".

Lo fundamental, según el azulino, "es no quedarnos descolgados porque las jornadas pasan y cada vez es más difícil. Necesitamos ganar, engancharnos y ponernos más cerca de la permanencia".

El mediapunta no considera que la llegada de Lillo vaya a resultar decisiva, pues cree que "no ha tenido demasiado tiempo para entrenar. Lo de a entrenador nuevo, victoria segura ya pasó a la historia, pero bueno, ya se sabe que cuando llega un técnico nuevo los jugadores intentan convencerle de que puede contar con ellos y seguro que motivados van a estar".

El choque de esta tarde será especial para Mario Bermejo, que vivió buenas experiencias en el cuadro andaluz. El delantero reconocía ayer que volver al estadio Juegos del Mediterráneo "será bonito porque allí dejé buenos amigos, pero poco más, porque ahora mismo estoy centrado en conseguir la victoria".

El cántabro espera a un "equipo muy enchufado porque acaban de cambiar de entrenador y eso motiva. Cuando ocurre eso los que están jugando quieren seguir contando para el entrenador, los que no juegan quieren ganarse el sitio y bueno, al final todos están enchufados".

"Sí es cierto que el técnico no ha tenido demasiado tiempo para inculcar sus ideas en profundidad, pero quizás puedan tener dudas y eso es lo que queremos aprovechar", agregó.

Bermejo cree que el Almería "ha ido de más a menos y ahora está viviendo una situación quizás nueva para el club en su etapa en Primera División". Además, considera que el equipo "está echando de menos a jugadores como Negredo, Bruno o Mané, futbolistas que han sido importantes en los dos años que han estado en Primera División. Están notando más de lo que debiera a esos futbolistas, aunque bueno, también tiene jugadores de calidad, que por ahora no han estado a su nivel pero en cualquier momento pueden romper".

Al ariete xerecista no le preocupan las estadísticas del equipo y apela a "luchar por el partido, a mí me dan igual las estadísticas. Siempre salgo a ganar, independientemente de que hayamos ganado antes o después. Tengo una confianza muy grande en el equipo, sé que vamos a remontar la situación y sobre todo tengo confianza en este partido en especial. Podemos luchar por salvarnos".

Otro de los que repetirá en el once por segunda jornada consecutiva es el sevillano Abel Gómez. El centrocampista también confía en "romper la dinámica que llevamos con la entrada del nuevo año. A ver si la suerte cambia y somos capaces de conseguir los tres puntos porque nos jugamos mucho".

El ex del Steaua afirma que el choque de esta tarde "es más importante de lo que parece. El Almería, a pesar de estar en una situación complicada, tiene un equipo competitivo y ahora, con el nuevo entrenador va a intentar aumentar la intensidad".

Para Abel, la clave está en "hacer las cosas como las hicimos ante el Racing de Santander, pero corriendo cosillas. Si jugamos así seguro que vamos a ser un equipo competitivo".

"Ahora viene un mes de partidos muy complicado y si ganamos en Almería todo se vería de manera muy diferente", confesó el volante hispalense.

También apuesta por acabar con la mala racha el lateral Casado. El sevillano confesó ayer que el duelo ante los almerienses "es un partido en el que no nos vale otra que ganar si no queremos quedarnos descolgados, porque de perder nos quedaríamos muy distanciados".

El defensa cree que el duelo de esta tarde "es un encuentro engañoso, ellos tienen nuevo entrenador y ya se sabe, puede ser un arma de doble filo. La gente que no ha estado entrando apretará y los que estaban jugando lo mismo, por eso digo que no va a ser un encuentro fácil".

Casado, no obstante, desea "lo mejor para el Almería, que es un equipo andaluz, a partir de la semana que viene. Necesitamos la victoria, sería bueno empezar el año ganando, nos daría mucha moral para afrontar con confianza los próximos partidos. Poco a poco el equipo está mejorando y sólo nos hace falta ganar un encuentro para que esto cambie de una vez".