El vicepresidente segundo de Diputación y responsable del área de Cooperación Municipal, Infraestructuras y Medio Ambiente, Bernardo Villar, ha inaugurado en Alcalá de los Gazules el programa formativo sobre Gestión Energética de la Biomasa promovido por el IEDT de Diputación con la colaboración de la Agencia Provincial de la Energía. A la apertura de esta iniciativa han asistido el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Alcalá de los Gazules, Juan Carlos Fernández Luna y la concejala de Educación, Susana Ruiz Gutiérrez. El programa comprende dos cursos, cada uno con 25 plazas: Gestión de Biomasa Rural e Instalaciones de Biomasa, que se impartirán hasta el 23 de julio. En septiembre estas mismas unidades se impartirán en Olvera.

En la presentación ante el alumnado, Bernardo Villar ha indicado que “estos cursos constituyen una ocasión inmejorable para aumentar el conocimiento sobre la biomasa y estimular la creación de empresas dedicadas a los servicios agroforestales y el diseño, instalación y mantenimiento de instalaciones consumidoras de biomasa”. El propio enclave donde se inicia este programa, Alcalá de los Gazules y su condición como uno de los accesos al Parque Natural de Los Alcornocales, es un escenario propicio para estimar el potencial de la biomasa considerando que se trata de “uno de los municipios con mayor superficie forestal de la provincia de Cádiz”.

Cada curso consta de 60 horas lectivas distribuidas en 40 de conocimientos teóricos y 20 de prácticas con visitas a empresas. La empresa Ingener del Sur imparte estas clases. El programa está financiado con cargo al Proyecto Integral de Desarrollo Local y Urbano, en el que convergen aportaciones de los fondos Feder más recursos propios de Diputación, y se incluye en el Plan de Desarrollo Local Sostenible. El citado plan es uno de los cinco programas que conforman el denominado Marco Estratégico Provincial de Desarrollo Económico que emprende Diputación hasta el año 2015.

La biomasa es un residuo de materia orgánica procedente de un proceso biológico inmediato, con aplicaciones como fuente energética. Derivados de la actividad forestal o de cuidado de zonas verdes como los restos de podas, leñas, astillas, cortezas, aserrín; residuos de la actividad corchera; e incluso residuos de actividades agroalimentarias o agropecuarias se confirman como fuentes de energía, bien sea a través de su combustión en calderas, en la producción de biogás, o aprovechadas como compost para la mejora orgánica de los suelos frente a la desertización. El reciclaje para la obtención de aglomerado o material de embalaje es otra de las aplicaciones prácticas de la biomasa.