El precio de la vivienda en Andalucía, así en términos generales, está subiendo a un ritmo menor al de la media nacional. El año pasado lo cerró con un incremento del 2,3% interanual. Sin embargo, el primer trimestre del año ha concluido con una subida de sólo el 0,9% respecto a finales de marzo de 2018.

Precio de la vivienda en las capitales de provincia. Fuente: UrbanData Analytics.

Hay sensación de cierta desaceleración en el mercado inmobiliario andaluz, al compás del también menor crecimiento económico que está afectando a toda Europa. Aunque sin parecer, de momento, nada realmente grave.

Cádiz, Málaga y Sevilla

Sin embargo, esta sensación que vale para el panorama general, se diluye al observar en detalle la evolución de ciertos municipios. Cádiz, por ejemplo, además de ser la capital de provincia más cara de Andalucía ha experimentado un incremento del 9,3% en el precio del metro cuadrado entre abril de 2018 y el mismo mes de 2019.

Así, la capital gaditana es junto a Torremolinos la localidad andaluza de más de 60.000 habitantes donde más ha subido el precio de la vivienda. Les sigue Fuengirola, con un aumento del 9,1%.

Los 1.965 euros que cuesta el metro cuadrado de vivienda (nueva o de segunda mano) de media en Cádiz, donde la falta de suelo y el efecto de los apartamentos turísticos han creado un mezcla imbatible, es bastante superior a la media andaluza: 1.435 euros el metro cuadrado.

Cádiz también rebasa por bastante a los valores que se registran en sus dos claras perseguidoras: Málaga y Sevilla.

En la capital malagueña, el precio del metro cuadrado se sitúa en 1.831 euros, tras una subida del 8,9%.

Mientras que en la capital hispalense, el importe del metro cuadrado está en 1.802 euros, después de aumentar un 7,2%.

Ya lejos queda Granada, la otra capital andaluza que ha experimentado una notable subida en el último año (7,1%), con 1.581 euros el metro cuadrado.

Capitales estancadas

Las otras cuatro capitales de provincia se acercan más a lo registrado en la media andaluza, con subidas tímidas o, incluso, descensos como ocurre con Jaén (-1,1%) y Córdoba (-0,3%).

Huelva sólo ha visto subir precio del metro cuadrado un 0,2%. De este modo, a un onubense le cuesta vivir en la capital de la provincia menos de la mitad que a un gaditano vivir en Cádiz.

El importe en Huelva está actualmente en 981 euros el metro cuadrado y es la única capital de provincia en Andalucía que no supera los mil euros.

Jaén es la segunda más barata, con 1.039 euros el metro cuadrado. Le siguen Almería (1.107 euros) y Córdoba (1.302 euros). Todas ellas, por debajo de la media andaluza.

Otras localidades

Analizando la totalidad de los municipios andaluces, y no sólo las capitales, Marbella es con diferencia la localidad más costosa en la que vivir. En la ciudad marbellí el metro cuadrado está el importe prohibitivo de 2.751 euros.

A mucha distancia, se encuentra Fuengirola, con 2.090 euros el metro cuadrado.

La ya citada Cádiz cierra el podio de ciudades más caras de Andalucía y es la única que se cuela entre las localidades de la costa malagueña, ya que le siguen, por orden, Estepona, Benálmadena, Torremolinos, Málaga y Mijas.

Así, Sevilla se coloca como el noveno municipio más caro de Andalucía y Granada cierra el top ten andaluz.

Esfuerzo de compra

Por otra parte, Málaga lidera la clasificación de capitales atendiendo al esfuerzo de compra, que son los años de renta bruta que una familia con unos ingresos medios tiene que destinar a pagar una vivienda.

Las familias malagueñas necesitarían 7,4 años de renta bruta a pagar una vivienda, las sevillanas, 6,9 años, y las gaditanas, 6,7 años. El resto de capitales de provincias están por debajo de la media andaluza, que es de 6,5 años.

Esta radiografía del mercado inmobiliario andaluz es posible gracias a los datos exclusivos de UrbanData Analytics (UDA), que es la primera empresa española de Big Data que aplicó la inteligencia artificial única y exclusivamente para este sector.

UDA recopila y elabora datos de diversas fuentes públicas como el Instituto Nacional de Estadística, el Catastro, el Colegio de Registradores o el Consejo General del Notariado; y de privadas como agregadores de portales inmobiliarios o tasadoras.