Economía

Pistas para mejorar la salud financiera tras la pandemia

  • Jaime GarcíaResponsable de Banco Mediolanum en la Zona Sur

La salud financiera tras la pandemia

La salud financiera tras la pandemia

Jaime García Jaime García

Jaime García

Las consecuencias personales, sociales y sanitarias de esta pandemia son más que evidentes, además de su impacto económico para muchas familias. Y ante situaciones de incertidumbre, se despierta algo tan humano como el miedo.

En esta crisis, las restricciones han frenado el consumo y han provocado un efecto colateral: la tasa de ahorro se ha incrementado en España hasta los cien mil millones de euros desde el inicio de la pandemia. Un dinero que, en ocasiones, está parado y perdiendo valor.

En contraste con esto, la brusca recuperación de los últimos meses ha generado una escasez de materias primas y productos, como el gas o los chips, que está reduciendo la capacidad productiva de ciertos sectores. Y, como es conocido, ante la escasez, suben los precios. No hay más que ver cómo está la luz o el combustible. ¿Consecuencia? El IPC de septiembre en un 4%.

Este escenario dispara un miedo que afecta a nuestra salud financiera. Por eso es interesante escuchar a economistas y especialistas en finanzas conductuales como Diego Valero, que estudian cómo impactan las emociones en la economía. En una intervención reciente argumentó que hay que ser optimistas ante entornos paralizantes. En parte por la experiencia acumulada en la anterior crisis de 2008, las autoridades financieras y económicas han reaccionado mucho más rápido a la situación actual.

Pero esta será una reacción estéril si los inversores, por un exceso de prudencia, deciden esperar y ver. Valero anima a mirar al futuro con optimismo porque la inacción estanca nuestras finanzas. Y eso, en tiempos de inflación, es perder dinero.

Por eso propone seis recetas para mejorar nuestra salud financiera:

  • Centrarse en el día a día para evitar que la emotividad influya negativamente en nuestras decisiones financieras, que, en su opinión, “no deben regirse por el aquí y ahora basado en el derroche”.
  • Segundo, la pandemia ha puesto de manifiesto la importancia de tener un fondo de emergencia para imprevistos.
  • Además, es bueno generar ahorro para el futuro. Para ello necesitamos disciplina a corto plazo y apartar dinero de forma periódica, a poder ser de forma mensual.
  • Para que las finanzas gocen de buena salud también es imprescindible establecer objetivos a largo plazo en función de las distintas fases vitales como la jubilación.
  • También recomienda proteger nuestras finanzas con inversiones acordes con unas estrategias a largo plazo y con mecanismos de cobertura que tienen algunas soluciones financieras.
  • Por último, Valero da una receta transversal, válida para cualquier inversión: prever las cosas que nos esperan a lo largo de nuestra vida y cómo pueden afectarnos a nivel financiero. En definitiva, planificación para anticiparnos a lo inesperado. Tranquilidad para encarar siempre el futuro de forma razonablemente optimista.