El fabricante japonés de vehículos Toyota Motor invertirá al menos 10.000 millones de dólares (unos 9.425 millones de euros) en Estados Unidos en los próximos cinco años, confirmó ayer a Efe en Tokio una portavoz de la compañía.

El plan se conoce pocos días después de que el presidente electo estadounidense, Donald Trump, amenazara a la compañía con altos gravámenes si apostaba por producir en México para exportar a EEUU.

La portavoz de la empresa explicó que la inversión se centrará en introducir su nueva arquitectura global -Toyota New Global Architecture (TNGA)- en plantas de EEUU, en la construcción de su nueva sede en Plano (Texas) o en el desarrollo de vehículos autopilotados en el país norteamericano.

El presidente de la empresa, Akio Toyoda, recordó el lunes, al hablar del plan de inversión en el Salón del Automóvil en Detroit, que el fabricante japonés ha invertido 22.000 billones de dólares (20.750 millones de euros) en los últimos 60 años en EEUU, donde cuenta con 136.000 trabajadores.

Por su parte, el vicepresidente de la distribuidora estadounidense de Toyota, Bob Carter, afirmó que el proyecto responde a los planes de futuro de la empresa -que mantiene su intención de fabricar el Corolla en Guanajuato (México)- y que no se trata de una acción para contentar a Trump.

El pasado jueves Donald Trump amenazó en Twitter con imponer fuertes aranceles a Toyota si sigue adelante con su plan de estrenar una planta en México para producir el Toyota Corolla. La nueva factoría en el Estado mexicano de Guanajuato prevé producir a partir de 2019 hasta 200.000 unidades al año del modelo Corolla, el segundo de más ventas en EEUU en el segmento de berlinas compactas y que actualmente se produce en Cambridge (Canadá) y Misisipi (EEUU). La empresa nipona explicó que la apertura de esta planta no afectará a sus operaciones en el país, ya que la fábrica de Guanajuato relevará en la producción del Corolla a la de Canadá, que pasará a producir vehículos de gama más alta.

Por otra parte, ayer se supo que el fabricante español Seat cerró 2016 con el cuarto crecimiento anual de ventas consecutivo, al registrar unas entregas mundiales de 410.200 unidades, un 2,6% más. Fue el mayor volumen de ventas desde 2007 para la firma con sede en Martorell (Barcelona).