Economía

Así logró Mercadona mascarillas para todos sus empleados en lo peor de la pandemia

  • El lunes 16 de marzo todos los trabajadores tenían una cuando en España era muy difícil encontrar alguna

  • Roig dice que sabe quién será su sucesor, pero añade que seguirá mientras se encuentre bien

Una cajera de Mercadona

Una cajera de Mercadona

La presentación de resultados de Mercadona comenzó con un largo relato de la peripecia de la empresa durante la pandemia. Su presidente, Juan Roig, explicó que el mismo día de la rueda de prensa de 2019, el 10 de marzo, se multiplicaron las ventas por 2,5. Que la primera semana del confinamiento fue "traumática" y los trabajadores estaban "asustados". Y que la empresa consiguió en tres días proveer de mascarillas a sus 95.000 empleados, cuando en España no había, literalmente.

"El viernes 13 (de marzo) decidimos que debían que tener mascarilla . Encontramos un señor español, que nos la vendía a 1,57 euros la unidad. El lunes 16 todos nuestros trabajadores tenían mascarillas. Movimos cielo y tierra para conseguirlas y distribuirlas. Nos lo agradecieron mucho", afirma Roig, quien añade que en esta gestión participó un equipo de 15 personas de Mercadona que trabajan en China.

La cadena llegó a invertir 200 millones en 100 medidas, entre las que estaban el gel hidroalcoholico gratis para los clientes, señalizaciones, mamparas, seguridad externa, personas encargadas de control de aforo, aparcacarritos y un 'call center' interno para urgencias sanitarias. La dimensión del asunto fue tal que llegó a celebrar 11 comités de dirección, todos presenciales, en un mes.

Roig agradece la consideración de sector esencial para su empresa y sus competidores. Cree que los trabajadores "debían haber estados vacunados ya, aunque ya no vale la pena la discusión, el tema está pasado". 

Mercadona, por otro lado, no recurrirá a ninguna ayuda pública porque prefiere crecer con sus propios medios y ganar así en agilidad. Roig afirma que, a nivel general, la reactivación general vendrá de cuidar el espíritu empresarial y agilizar los trámites. "Debe bastar una declaración responsable o silencio administrativo. Dejemos que los empresarios, que son gente honrada, hagan cosas. No pongamos palos en la rueda".

Por último, se refirió a su sucesión. "Sé quien me va a sustituir. Lo sé yo. Él o ella no lo sabe. Pero mientras me encuentre mental y físicamente bien voy a seguir. El año que viene os espero".

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