Andalucía batió el pasado mes de mayo (ya estuvo a punto de hacerlo en abril) su marca histórica de afiliados a la Seguridad Social. Sumó, en total, 3.185.712 cotizantes de media, la mayor cifra mensual de la serie estadística. Y lo consiguió tras un gran mayo, el mejor que se recuerda, con 31.342 nuevos empleos. Ello fue posible gracias al tirón del sector servicios y, en concreto, de la hostelería, que concentró prácticamente la mitad de todo el empleo creado, y al dinamismo Málaga, Sevilla y Cádiz, por ese orden.

El hito que logra la región gracias a este empujón supera con mucho la cifra alcanzada en julio de 2007, 3.158.671 cotizantes, que era donde hasta ahora estaba situado el tope. Habrá que esperar, de todas formas, a final de año para saber si Andalucía es capaz de superar la media anual precisamente de 2007, cuando se alcanzó la cifra récord de 3.127.287 afiliados.

La región crea más de 31.000 nuevos empleos en mayo y reduce el paro en casi 18.000 gracias al sector servicios

Lo cierto es que ni siquiera con esa cifra de empleo la región baja el paro en la medida deseable. La 'recuperación' para el mercado laboral de los que se quedaron parados por la crisis y la incorporación de los jóvenes hace que la demanda todavía sea muy superior a la oferta. Así, el número de parados se situó en mayo en 761.113 personas, muy lejos aún de los 485.693 que se registraban en julio de 2007. Ello significa que el empleo que se crea es insuficiente para reducir el desempleo en la misma medida. Las 17.981 personas que abandonan las listas del paro en mayo, con ser más que el año pasado, son menos que los más de 31.000 empleos creados.

Del mismo modo, en un año, de mayo de 2018 a mayo de 2019, Andalucía tiene 39.207 parados menos y 98.348 afiliados más. De nuevo el mismo fenómeno: se crea empleo, mucho, pero la bolsa que hay que absorber es tan grande (y en aumento por la incorporación de nuevos candidatos) que el lastre del paro sigue siendo una triste realidad.