La empresa de placas fotovoltaicas Isofotón, con 700 empleados en su sede del Parque Tecnológico de Andalucía, es la mayor industria de energía renovable de Andalucía. Pero no es inmune a la crisis económica. La compañía propiedad del grupo vascocántabro Bergé ultima la presentación en esta semana de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) ante el Ministerio de Trabajo.

¿Por qué en Madrid, donde tiene sólo 100 empleados, y no en Málaga? "Allí seguro que las autoridades laborales se lo aceptan más rápido y encima se quitan la presión de los sindicatos y trabajadores en Málaga", aseguró ayer Vicente Escaño, sindicalista de Comisiones Obreras. Los sindicatos calculan que afectará a un tercio de los 800 empleados totales (en torno a 260). La empresa justifica el ERE por "la situación de paralización temporal del mercado fotovoltaico ante las restricciones de crédito a la financiación de proyectos".

La plantilla no se niega a un ERE, pero pide negociar y que sea presentado en Málaga. Entre las condiciones que pone para hacerlo se encuentra la petición de que afecte "lo menos posible" a los salarios, que no sea presentado por problemas financieros, sino de producción, y la contratación de los últimos 22 despedidos.

El pasado 9 de enero la empresa echó a este número de empleados y tampoco renovó a 167 trabajadores temporales, causa por la que los sindicatos realizaron entonces distintas movilizaciones.

La situación también afecta a los 140 trabajadores de cinco subcontratas de Isofotón. La firma que preside Pedro Enciso facturó 450 millones el pasado año, un 45% más que en 2007.