Manuel Guerra. Número 1 del PSOE al Senado por Huelva

"Votar otras opciones significa perpetuar a Rajoy en la Moncloa"

  • El socialista afirma que aportará el conocimiento de la realidad de la calle, capacidad de trabajo y pragmatismo

Tras una legislatura en la que Huelva "ha sido relegada al último lugar en cuanto a inversiones y proyectos", el cabeza de lista socialista al Senado, Manuel Guerra, aboga por "recuperar el tiempo perdido" apostando por las infraestructuras, el desarrollo económico, la generación de riqueza y la creación de empleo.

-Con los pies en la tierra y teniendo en cuenta lo novedoso del escenario político actual, ¿creen que es factible aspirar a al tercer escaño?

-Nos presentamos con la máxima ilusión de seguir siendo el partido de referencia para la inmensa mayoría de los onubenses. Venimos de un año electoral en el que los resultados en la provincia han sido muy positivos, tanto en las autonómicas como en las municipales, y tenemos la absoluta confianza de que obtendremos un respaldo muy mayoritario. Teniendo en cuenta nuestro sistema electoral, con cinco diputados a repartir, solo hay dos opciones: votar directamente al PP y, por tanto, perpetuar la situación de recortes de derechos y retroceso económico y social, o votar la opción del cambio. Y la opción del cambio la representa el PSOE. Por tanto, votar otras opciones significa indirectamente perpetuar a Rajoy en la Moncloa.

-Las listas de su partido han sido criticadas por no incluir a candidatos jóvenes.

-La actividad política requiere de un compromiso y en cualquier país del mundo el tener una trayectoria detrás es un valor a tener muy en cuenta. Incluso hay países, como Francia, en los que es casi una ley no escrita el que todos los políticos nacionales hayan tenido antes una trayectoria en la política local. Tanto mis compañeros como yo, que venimos de la política local, vamos a aportar ese aterrizaje en la realidad de la calle, ese conocimiento profundo de la opción de los vecinos, de sus problemas, sus demandas, sus aspiraciones, y esa capacidad de trabajo en condiciones muy adversas. Aportaremos también pragmatismo en un momento en el que la política se desliza hacia la política espectáculo de los grandes discursos, de las tertulias televisivas, y en la que se habla mucho de grandes conceptos.

-Si pisa el Senado, ¿qué hará por Huelva?

-Quiero que esta provincia contribuya a construir ese nuevo proyecto que tenemos para España. Una España más justa, solidaria y en la que el progreso alcance a todos. Por otra parte, este país tiene una deuda histórica con la provincia. Es el momento de Huelva, no nos podemos permitir más retrasos y tiene que ser una de las provincias hacia las que haya una atención preferente y una discriminación positiva para sacar adelante un territorio que, a diferencia de otros sobre los que se ha actuado, tiene todas las potencialidades para ser uno de los territorios con más capacidad de generación de capacidad de riqueza, de progreso y de empleo.

-¿Realmente la Cámara Alta es útil?

-Debe serlo. Es una cámara que debe llevar la voz de los territorios de nuestro país y, de hecho, consideramos fundamental darle una nueva dimensión como cámara de representación territorial y, por tanto, de presencia de los territorios de nuestro país en lo que es el Gobierno de la nación. Yo creo que el Senado tiene muchas potencialidades, como en otros países sobre todo de corte federal y en nuestro país también debe tenerlo, más aún teniendo en cuenta su diversidad y tensiones territoriales. El Senado puede ser una pieza fundamental precisamente en lo que es la búsqueda del encaje de todos los territorios de España en este proyecto conjunto.

-¿De qué serviría trasladarlo a Barcelona, tal y como ha propuesto Sánchez?

-En política los gestos cuentan y son importantes. Todos los españoles nos tenemos que sentir partícipes de un mismo proyecto común y no estaría mal que determinados órganos del Estado también tuvieran su sede en las diferentes comunidades autónomas, como ocurre a nivel europeo con la UE. Quizás se ha pecado de centralismo y se ha concentrado todo en la capital del Estado. Muchas veces se confunde Madrid con el resto de España y uno de los factores que ha influido en la visión que tienen los ciudadanos de lo alejados que están los políticos de la realidad de la calle es ese síndrome de la capital, el síndrome de la Moncloa lo llaman.

-Alrededor de 600 jóvenes jóvenes onubenses han tenido que marcharse fuera para ganarse la vida. ¿Qué medidas concretas incluye el plan para el retorno del talento anunciado por su partido?

-Por ejemplo, un plan en materia de ciencia e investigación para que, con la colaboración de las universidades, 10.000 investigadores puedan reanudar sus trabajos de investigación en nuestro país. También vamos a poner en marcha una serie de medidas de apoyo a determinados sectores para favorecer la contratación de estas personas y que puedan encontrar una oportunidad laboral. En este sentido, apostamos por un nuevo modelo económico, porque el país debe pasar del modelo especulativo que ha imperado en los últimos años a un nuevo modelo en el que impere la innovación. Debemos ser competitivos por nuestra capacidad de innovación, en lugar de competir, como ocurre en estos momentos, por los bajos salarios y por la precariedad laboral.

-Hablemos de Empleo. Báñez ha prometido 50.000 puestos de trabajo en Huelva.

-Báñez le faltó al respeto a los onubenses. Durante cuatro años no se le ha visto el pelo en la provincia y no se ha acordado de ella para nada: por ejemplo, cuando se le ha demandado reiteradamente un plan especial de empleo como el de Canarias o el de Extremadura. Así que no es de recibo que ahora venga prometiendo prácticamente el pleno empleo. Hay que ser un poquito más serio porque cuando se hace este tipo de afirmaciones se está aludiendo a personas que lo están pasando tremendamente mal y no se puede jugar con la vida de la gente. En cuatro años la realidad es que Huelva está peor en términos de empleo que en 2011. En estos momentos tenemos casi 2.400 personas desempleadas más y eso evidencia que uno de los grandes reclamos electorales del PP en 2011, como tantos otros, fue un tremendo engaño. Por tanto, ese tipo de promesas los ciudadanos no tienen capacidad de creerlas.

-¿Qué propone para incentivar el empleo?

-Hay que tomar medidas de urgencia. Los planes de choque son útiles para ofrecer una oportunidad laboral a personas que en este momento están al borde de la exclusión social, de la misma forma que en Andalucía se hace con el plan emplea Joven o Emple@30+, o como lo hace la Diputación con planes especiales, o los ayuntamientos, que han movilizado recursos. Es importante que a esa estrategia se sume también el Gobierno central y se destinen fondos a crear planes inmediatos de empleo para ofrecer una oportunidad laboral a esas personas. Por otra parte, hay que darle un giro al modelo productivo del país, tenemos que sentar las bases para la creación de un modelo económico que genere empleo estable y de calidad. Tenemos todas las herramientas y potencialidades para hacerlo.

-¿Cómo se concreta eso en la provincia?

-Apostando por sectores como la agricultura, la ganadería, la industria agroalimentaria, la pesca la acuicultura o el desarrollo rural en su más amplia dimensión. Tenemos que evitar que, como ocurre en otros territorios de España, poco a poco la gente se vaya marchando. Estamos hablando también de sectores con un fuerte componente de innovación, como las energías renovables, o también proyectos como la industria aeronáutica y sectores como el turismo, en el que Huelva tiene unas potencialidades enormes.

-¿Qué medidas llevarían a cabo para impulsar esas potencialidades?

-Por una parte, medidas para fomentar el emprendimiento con incentivo fiscales, también medidas de ayuda a todos esos sectores que pueden tener capacidad de generar empleo, apostar por la modernización de los mismos, tanto de los sectores tradicionales como de los emergentes. También es necesario un plan de reindustrialización, porque no podemos ser solo un país de servicios. En Huelva es fundamental la mejora de las infraestructuras, lo que posibilitaría una mayor competitividad de esos productos, pero también supondría que Huelva pudiera ser un destino mucho más accesible y, en el ámbito turístico, poder dar ese salto para convertirnos en uno de los destinos turísticos de referencia de nuestro país.

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