-Supongo que estará en la cresta de la ola con este segundo mundial.

-He estado en muchas este año y quiero seguir en ellas, la ola es una de las cosas favoritas en mi vida.

-Luchado, peleado y disputado hasta el final.

-Cada prueba, cada manga, cada minuto en el agua lo disfruto al máximo. Para mí, todo es aprovechar el tiempo y creo que lo he sabido hacer.

-¿Sabe mejor el primer o el segundo mundial?

-El primero siempre es el primer objetivo que nos ponemos en la vida y todos queremos que caiga cuanto antes.

-No hay dos sin tres.

-Ojalá sea así. El dos está claro que me gusta más que el uno, pero menos que el tres en cuanto a títulos mundiales se refiere.

-¿Cómo fue la celebración tras verse campeón?

-Muy rápida, prácticamente sin esperármelo. Estaba en la playa y vinieron a avisarme de que era campeón del mundo porque mi rival no había pasado el corte necesario.

-¿Las olas son sus mejores amigas?

-Casi siempre, cuando me acompañan las mejores sí que lo son. Hay veces que te acompañan las peores y entonces no son tan amigas. Aprendo de ellas todos los días.

-¿Cuál es su secreto cuando se sumerge en el mar?

-Disfrutar cada minuto que estoy en el agua, agradecerle lo mucho que me aporta.

-Imagino que sorprende escuchar el rugido de las olas.

-Cada vez me cae una ola encima es impresionate, te provoca unos revolcones bestiales.

-¿Pasa más horas en el agua o sobre la tierra?

-Cincuenta y cincuenta, trabajo mucho en el agua, pero también es importante hacer ejercicio, sobre todo para prevenir lesiones.

-¿Se va más cómodo en el coche o en la tabla de windsurf?

-En una tabla de windsurf, sin duda. En el coche a veces soy un poco peligroso.

-¿Le gusta más el viento de Poniente o de Levante?

-El Poniente es más fresco, el Levante es mucho más caluroso en Almería, pero en ambos me siento cómodo junto al mar.

-¿Va a la montaña?

-Sí, no soy un gran montañero, pero de vez en cuando me gusta cambiar el mar por otro lugar y respirar un poco de aire fresco y puro.

-Siendo de Almería, no hay mejor campeón que uno que combine el viento y el mar.

-Viento y mar es lo que manda en mi tierra, es mi combinación ideal. Además del Mediterráneo, también tenemos un mar de plástico impresionante.

-¿Qué tiene ahora Víctor entre manos?

-Seguir mejorando día a día para pelear por otro título mundial. Fácil tengo claro que no va a ser, pero no me pongo límites como deportista.

-Sería inolvidable para usted celebrar una de las pruebas del Mundial en Almerimar.

-Sería increíble competir ante mi gente. Sería algo que marcaría mi carrera deportiva.

-¿Cuál es el primer recuerdo que se le viene a la mente de sus inicios en este deporte?

-Mi primer recuerdo es coger el material de mi padre con 5 años, meterlo en el agua arrastrando e ir enganchado como un orangután en la botavara de la vela.

-¿Se ha visto en apuros en algún momento?

-En algún momento puede que sí, en alguna playa que no conocía demasiado bien, con muchas olas y rocas cerca de donde yo estaba. Quizás lo he pasado mal, pero eso me ha enseñado a superarme.

-¿Mientras haya olas habrá Víctor?

-Siempre, no me las van a quitar de la cabeza porque son mi vida.

-¿Qué echa de menos de su día a día en El Ejido?

-Estar con mi familia y mis amigos. Siempre es bueno estar con la gente que te quiere.

-¿Qué le queda por hacer?

-Ganar más título e inventar maniobras nuevas sobre la tabla.