Alfonso Reyes | Presidente de la ABP

"Es mucho más duro el baloncesto que la política"

Alfonso Reyes, presidente de la ABP.

Alfonso Reyes, presidente de la ABP. / Cipriano Pastrano / La Razón

Fue durante casi dos décadas jugador de élite, una roca de dos metros bajo el aro, y hoy defiende los intereses de los baloncestistas profesionales españoles como presidente de la ABP. Nacido en Córdoba y con apellido de Canena (Jaén), Alfonso Reyes (1971) presume de sangre andaluza aun llevando muchísimo tiempo residiendo en Madrid. Sacude en las redes sin contemplaciones, fuerte y flojo, al Gobierno por la gestión de la crisis sanitaria. Sabe de lo que habla tras vencer al coronavirus –y contarlo– al inicio de la pandemia.

–¿Cómo está meses después de vencer al Covid?

–Perfectamente, pero le tengo bastante respeto al hideputa, como lo llamo yo, porque nadie me puede asegurar que no lo vuelva a pillar y no me gustaría pasar otra vez por lo mismo. No le tengo miedo, pero sí respeto. Viendo las secuelas que hay me puedo considerar afortunado.

Doctor Reyes, ¿augura un otoño dramático?

–No lo sé, soy un simple ingeniero de Caminos. Lo que dice mi experiencia es que no hay que pasarlo, sobre todo sintomáticamente. Si se pudiera elegir, todos cogerían la opción asintomática, pero debe quedar claro que no es una enfermedad sólo de viejos, sino que a todos nos puede llevar por delante, así que mucho cuidado.

–¿Lo estamos haciendo fatal o los demás países son unos embusteros?

–No lo sé, me importa lo que pasa aquí y no se ha hecho bien ni se está haciendo bien.

–Es muy de libros de Historia. ¿Con qué etapa asemejaría esta situación?

–Desde la peste negra del siglo XIV pasando por la gripe de 1918, que es la más cerca que tenemos. Veo fotos del 18 y hay más mascarillas de las que había aquí al principio; por tanto, no hemos aprendido nada. Que la mascarilla no fuera obligatoria al principio me parece lamentable, siendo, como intuíamos, vital para impedir la transmisión.

–Se supone que no había suficientes mascarillas.

–Bueno, pues que se diga. A la gente no le gusta que le mientan, aunque sean noticias que no le gusten.

–Se le nota a la legua su admiración por las políticas de Pedro Sánchez, con quien coincidió en la cantera del Estudiantes...

–Coincidimos en la cantera, pero no en el equipo; en este tiempo nos hemos visto un par de veces.

–Hace un tiempo dijo que era un poco paquete...

–En el sentido de que llegar a la élite es muy difícil. No diré que era un paquete, pero yo tuve la suerte de llegar; si no lo hubiera hecho, tampoco pasaba nada, me habría dedicado a otra cosa.

–¿A quién invitaría a casa a cenar en Nochebuena: Pedro Sánchez, Pablo Iglesias o Fernando Simón?

–A nadie, la Nochebuena es para pasarla en familia.

–Dicen que es más de derechas que Fraga pero preside un sindicato (ABP). ¿Eso cómo se come?

–No sé qué dice la gente, pero tengo claro que en la ABP mi obligación y devoción es defender a los jugadores profesionales de baloncesto y es lo que intento hacer.

–¿Ser zurdo es una maldición?

–No, en mi caso es una bendición. Además, soy zurdo desde que nací...

–Algunos lo acusan de ser una marioneta de Vox. ¿Juega al mus con Abascal, Ortega Smith y Espinosa de los Monteros?

–Jajaja. No sé quién, pero quien lo haga no me conoce.

"Pérez Reverte es como yo, español a nuestro pesar y gracias a Dios; he vivido y viajado fuera y aprecio lo que tenemos aquí"

–¿Le ha afeado algún jugador que exprese con tanto contundencia sus opiniones en las redes?

–No, intento hacerlo con ironía y sobre todo con respeto y moderación. Hay que dejar un poco de lado ese maniqueísmo de no poder expresar lo que uno piensa. Es importante que los deportistas expresen de vez en cuando lo que sienten y cómo ven la situación del mundo en el que viven.

–A los deportistas se les acusa de mojarse poco.

–Respeto al que se moja y al que no lo hace. Puedes coincidir o no, pero no debe influir en otras facetas.

–¿Sobreviviría en este baloncesto midiendo menos de dos metros y sin poder tirar a más de ídem del aro?

–Mido dos metros, menos no, eso seguro que lo dice el que afirma que soy una marioneta de Vox. No lo sé, pero no sólo sobreviví sino que jugué bastante bien en una época en la que había grandísimos jugadores, muchos de los cuales aún siguen, como un tal Pau Gasol y un tal Felipe Reyes.

–Antonio Martín preside la ACB, Jorge Garbajosa manda en la FEB y usted dirige la ABP. ¿Los bases sólo lideran en la cancha?

–Me temo que sí, a la hora de la verdad los pívots somos los que damos el callo.

–¿Es más españolazo Pérez Reverte o usted?

–Pérez Reverte es como yo, español a nuestro pesar y gracias a Dios. A mí me ha tocado nacer aquí, he vivido fuera, he viajado mucho y eso me ha servido también para valorar lo que hay aquí, apreciar lo que tenemos.

–La ex presidenta de la Junta Susana Díaz tardó 10 años en sacar Derecho y usted 17 en terminar Caminos. ¿Para cuándo el salto a la política?

–Nunca. Pero animo a los jugadores a que se formen, estudien y se preparen para la vida después del baloncesto. Creo que Susana Díaz no tuvo que compaginarlo con una carrera de deportista profesional...

–Pero andaba desde joven en los entresijos políticos.

–No es lo mismo. Nos peleamos mucho más en el baloncesto. Es mucho más duro el baloncesto que la política.

–Borges dijo que no sabía que el hermano de Manuel Machado era escritor. Ese tal Felipe, ¿es pariente del gran Alfonso Reyes?

–Según él sí. Me llena de orgullo y satisfacción, como diría alguien, que uno de los mejores deportistas de España me ponga como ejemplo, aunque sea su hermano.

–Usted tiene más estudios.

–Sí, estudié más... porque me costó bastante. Tiene guasa que siempre me ha dicho que no tenía tanta fuerza de voluntad como yo. ¡¡¡Pues lleva 22 años en la élite del baloncesto!!! Eso no es fuerza de voluntad, sino todas las aleaciones posibles de los mejores metales.

–Algunos de los nombres de reyes de España más repetidos son Alfonso, que ha habido trece, y Felipe, que vamos por el sexto... Sus padres eran unos cachondos, ¿no?

–Mi abuelo paterno se llamaba Felipe y mi padre Alfonso. Hay dos hermanos más:Rafael por mi abuelo materno y Miguel Ángel por un tío. Tenemos nombres de reyes y de artistas del Renacimiento.

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