La polvareda por el nuevo Ejecutivo de Navarra va para largo por las críticas de PP, Ciudadanos y Vox al PSOE por el apoyo en modo de abstención de Bildu, permitiendo la elección como presidenta de la Comunidad Foral a la socialista María Chivite. Ésta aconsejó ayer "paciencia" a sus 13 consejeros porque cree que pasarán "momentos duros", pero destacó que el Ejecutivo de coalición que preside es "un Gobierno entre diferentes formaciones que enriquecen la mirada hacia las políticas públicas, pero sobre todo que se parece bastante a la sociedad".

Chivite cerró el acto de toma de posesión de los 13 consejeros en el Palacio de Navarra con un discurso en el que les dio las gracias por "querer ser parte de este proyecto que es el del compromiso con una Navarra foral, innovadora, igualitaria, en convivencia dentro de esa pluralidad que es parte de nuestra esencia".

Subrayó que se trata de un Ejecutivo de coalición formado por PSN, Geroa Bai y Podemos, "un Gobierno entre diferentes formaciones que enriquecen la mirada hacia las políticas públicas, pero sobre todo que se parece bastante a esta sociedad a la que representamos, para la que trabajamos y a la que nos debemos". "Es una sociedad plural que nos pide respeto y escucha", enfatizó.

Reclamó "paciencia" a los nuevos miembros del Ejecutivo porque "pasaremos momentos duros, así es la gestión pública", pero se mostró "convencida" de que "también compartiremos satisfacciones". A su juicio, "si entre todas y todos somos capaces de mejorar la vida de la gente habrá merecido la pena el esfuerzo y el paso que damos".

El presidente de Canarias, el socialista Ángel Víctor Torres, defendió ayer el Gobierno navarro. "Chivite va a hacer historia porque es una mujer valiente y sabe claramente lo que tiene que hacer", dijo Torres en RNE, donde aplaudió el Gobierno formado por el PSN y que considera que es "absolutamente legítimo".

En cambio, el presidente del PP de Extremadura, José Antonio Monago, advirtió del "peaje" de llegar a "acuerdos con los herederos de ETA" y criticó la postura al respecto del presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, que, según dijo, ha sido el "único barón socialista que lo ha justificado". "Ya no hay ninguna duda" de que el PSOE "está dispuesto a llegar a acuerdos con quien haga falta con tal de conseguir poder", afirmó.

Mientras, el Sindicato Unificado de Policía en Navarra exigió a la presidenta del Ejecutivo foral que derogue la "infame" ley foral de reconocimiento y reparación de las víctimas por actos de motivación política provocados por grupos de extrema derecha o funcionarios públicos, conocida como "ley de abusos policiales".