La coincidencia de la campaña con la Semana Santa ha hecho que este año se haya duplicado la oferta de procesiones, de un lado las religiosas y de otro las laicas que al fin y al cabo son las caravanas electorales.
Los partidos organizan los actos políticos de sus líderes en función de sus objetivos, de los lugares en los que quieren poner el énfasis y de aquellos en los que sus estrategas les dicen que tienen más opciones de conseguir votos.
De las agendas que han hecho públicas las fuerzas políticas pueden extraerse algunas conclusiones. La primera, que viajar a Alicante el Sábado Santo y no encontrarse con un mitin es casi misión imposible.
Pedro Sánchez, Pablo Casado y Albert Rivera coincidirán, y si alguno piensa que con retrasar un día la visita será suficiente, se equivoca porque si va a Alicante el domingo se encontrará a Santiago Abascal.
Cuando el 31 de marzo se reunieron en Madrid unos cuantos miles de personas quejándose del olvido institucional de la denominada España vaciada, todos los partidos se apresuraron a lanzar sus propuestas contra la despoblación: carreteras, trenes, internet, consultorios médicos, escuelas... La verdad es que les prometieron de todo menos visitarles y por eso no se les puede reprochar que, salvo Pablo Casado, ninguno de los principales líderes políticos vaya a pasarse en toda la campaña por Soria, Teruel, Segovia, Palencia, Zamora, Cuenca, Huesca, Guadalajara... las provincias más despobladas.
Salvo contadas excepciones, sobre todo por parte de Sánchez, Pablo Casado es el único líder político que se pateará la España interior (ha visitado en los últimos meses las 52 provincias).
Si existe cierto riesgo de encontrarse estos días a Casado en una procesión en algún lugar de España, más difícil aún puede ser esconderse de Pedro Sánchez en esta Semana Santa si uno anda por Lérida o San Sebastián.
El candidato socialista ha salpicado de paseos sus jornadas electorales y el viernes los dará por el País Vasco.
Quiere pasear por la playa de La Concha en Donosti, pero los pronósticos del tiempo no hacen descartable que el presidente del Gobierno tenga que cambiar de planes y acabe poteando por el Casco Viejo.
En el conjunto de toda la campaña y a la espera de posibles cambios de última hora, Madrid, la Comunidad Valenciana, Andalucía, Cataluña y País Vasco serán las comunidades autónomas que recibirán más visitas de los líderes políticos en estos quince días.
Para Rivera la Comunidad Valenciana y Andalucía parecen las prioridades; Pablo Iglesias se dejará ver poco por la España interior y buscará el voto en las ciudades. Ninguno de los dos, ni tampoco Abascal parecen interesados en Galicia...
En cualquier caso para huir de la campaña no basta con evitar las caravanas, pueden llegar a cualquiera a través de Twitter, Facebook, Instagram o WhatsApp.
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