La presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, puso ayer de manifiesto que no se cierra a facilitar la investidura de Artur Mas como presidente de la Generlitat, pero le exigió que "aparque" la reivindicación de un concierto económico para Cataluña y que dé prioridad a la crisis.

Después de la reunión del martes entre Mas y el futuro presidente del grupo del PSC, Joaquim Nadal, el líder de CiU sondeó ayer la disposición del PPC ante el debate de investidura en una reunión en el Parlament que duró una hora. A la salida, Sánchez-Camacho explicó que todavía no ha decidido su voto porque quiere escuchar antes los propósitos de Mas, aunque señaló que le había hecho una serie de peticiones, buena parte de ellas calcadas a los compromisos de los propios convergentes. Entre estas reclamaciones que sintonizan con el discurso de CiU figuran por ejemplo medidas de austeridad en la Administración -el PPC quiere un máximo de 11 consejerías, CiU habla también de, como mucho, 12 departamentos, frente a los 15 actuales-, la supresión del impuesto de sucesiones y donaciones, ayudas fiscales para las pymes y priorizar la salida de la crisis.

Sánchez-Camacho además propuso a Mas que el primer pleno de la legislatura sea una sesión extraordinaria dedicada a la crisis y le pidió impulsar una ley de presupuestos con medidas para salir del bache económico.

La presidenta del PPC reclamó incluso a Mas que forme "el Gobierno de los mejores", con las personas "más cualificadas" para ser consejeros, un concepto que ha venido defendiendo el propio Mas desde hace meses.

El presidente del PP, Mariano Rajoy, regresó ayer a Barcelona para participar en el primer Comité Ejecutivo del PPC tras los comicios del 28-N, donde agradeció a los miembros del partido en Cataluña su implicación y su trabajo a lo largo de la campaña electoral.

El líder de los populares arropó a la candidata hasta en siete ocasiones a lo largo de los quince días previos a las elecciones, igual que otros dirigentes destacados del partido, como la secretaria general, María Dolores de Cospedal, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre.

El secretario general de ICV-EUiA, Joan Herrera, también se reunió ayer con Mas y aseguró que apoyará al virtual presidente de la Generalitat para avanzar en el proceso de autogobierno, algo necesario, a su juicio, después de la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut.

En declaraciones a los medios ayer después de una reunión con Mas "larga e interesante", Herrera señaló que debatirán sobre la propuesta de concierto económico que cada vez se ajusta más al pacto fiscal solidario" que defienden los ecosocialistas, aunque advirtió de que en este tema no vale "hacer trampas al solitario" porque el TC puede tumbar la iniciativa.