Un día después de que el lehendakari anunciara la fecha de las elecciones vascas el 1 de marzo, el vicesecretario de Política Autonómica y Local del PP, Javier Arenas, exigió ayer al Gobierno que ponga "toda la diligencia" para que "no se permita a los amigos de los etarras" presentarse a los comicios y no vuelvan así a ocupar un puesto en las instituciones democráticas.

Tras cuatro años de desencuentros por la política antiterrorista de José Luis Rodríguez Zapatero, que incluyó la negociación de la paz con los terroristas, populares y socialistas han vuelto a recuperar la unidad contra ETA en esta legislatura, que arrancó con la victoria del PSOE en el mes de marzo. De momento, esa renovada alianza parece no peligrar aunque uno de los motivos que condujeron a ese enfrentamiento fue precisamente la presencia de ANV en las últimas elecciones municipales -celebradas en 2007, un año antes de las generales-, y que terminó de abrir la brecha entre PP y PSOE. En aquella cita electoral fueron anuladas la mitad de las candidaturas que presentó la formación abertzale, que el PP denunció por su conexión con ETA-Batasuna y que informes policiales constataron en esos casos, si bien el resto de candidaturas logró esquivar los controles judiciales, consiguiendo presencia en muchos municipios del País Vasco.

Durante su intervención en una jornada sobre financiación autonómica, Arenas señaló que las elecciones en el País Vasco del próximo mes de marzo "son muy especiales", pues "no sólo representan el triunfo del cambio o la continuidad del proyecto excluyente nacionalista, sino que también significan jugarnos la democracia y la libertad". Arenas confió en que "en esta ocasión, y el Gobierno tiene toda la responsabilidad, no se permita que los amigos de los etarras se puedan presentar a las elecciones y estar sentados en instituciones democráticas, tal y como ha pasado en la anterior legislatura".

"Espero que haya toda la diligencia por parte del Gobierno, y es su responsabilidad, no para que no haya listas ni blancas ni negras, sino para que los amigos de los etarras no se sienten en las instituciones del País Vasco", subrayó el dirigente del PP, quien valoró que, "sólo con eso, ya habremos conquistado un éxito en los comicios".

El también presidente del PP andaluz aseveró que los ciudadanos "saben bien que el socialismo y el nacionalismo son las dos caras de la crisis económica". A su juicio, tanto en Galicia como en el País Vasco, el PP representa "la única alternativa real de Gobierno" frente a un socialismo "que imita todos los días al nacionalismo". Tanto es así, manifestó, que "en Galicia gobiernan juntos y en el País Vasco han firmado un acuerdo para los Presupuestos".

También habló de las elecciones vascas la líder de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Rosa Díez, quien dio por hecho que su formación, con un escaño en el Congreso, logrará representación en el País Vasco. Además, avisó de que su aspiración es ser "clave para desalojar al PNV" y, en un mensaje a su antiguo partido, el PSE, advirtió de que "nadie que no esté dispuesto a que el PNV se vaya a la oposición" contará con UPyD.