El PSOE solicitará la comparecencia urgente del ministro del Interior para que "dé explicaciones" ante un nuevo informe forense sobre los fallecidos en la playa ceutí de Tarajal que concluye que el material antidisturbios usado por la Guardia Civil "pudo contribuir de manera significativa" a la tragedia.

En concreto, el grupo parlamentario socialista solicitará el lunes la comparecencia urgente en la Comisión de Interior del Congreso de Jorge Fernández Díaz, según anunció ayer el PSOE en un comunicado.

Tras conocer el estudio, el portavoz del grupo socialista en la Comisión de Interior, Antonio Trevín, considera que "la información que el propio ministro dio en el Parlamento es inexacta, por no decir falsa en algunos casos, y eso es muy grave".

Trevín lamenta que con el Gobierno del Partido Popular "llueve sobre mojado en unas fronteras que están siendo-agregó- gestionadas caóticamente por el actual Gobierno".

Para el socialista, "la tragedia del Tarajal no se ha terminado, sigue abierta" y por eso reclama que Fernández Díaz comparezca para "saber si se mintió o no al Parlamento y por qué se hizo".

Antonio Trevín hace hincapié en que de lo que se trata es de gestionar las fronteras con "protocolos de actuación que guíen a las fuerzas de seguridad que las gestionan", pero sobre todo, incide, "que cesen estas prácticas de devoluciones en caliente y a la brava que son en este momento una ignominia para un Estado de derecho como el nuestro".

Lo negaron una y otra vez, tanto el delegado del Gobierno en Ceuta como el director de la Guardia Civil, pero el ministro del Interior desmintió el 13 de febrero en el Congreso a todos sus subordinados y finalmente admitió lo que decían las ONG y los propios inmigrantes supervivientes desde el primer momento: la Guardia Civil disparó pelotas de goma al agua mientras los inmigrantes intentaban entrar en España superando el espigón fronterizo.

No obstante, Fernández Díaz defiende la actuación de los 16 guardias civiles imputados. "Desde luego, el Gobierno y yo como ministro del Interior estamos convencidos, salvo que se demuestre lo contrario, que los guardias civiles son inocentes de lo que se les imputa. Actuaron correctamente".