-¿Es su primer Festival?

-No, es el tercero.

-¿Cree que cambiado mucho la organización?

-Ha cambiado para bien. Ahora todo funciona perfectamente.

-¿Le compensa el esfuerzo económico el Festival?

-Desde luego que merece la pena. Lo que se ofrece es de calidad, así que compensa venir.

-¿También piensa lo mismo de los espectáculos?

-Claro. Los artistas que vienen, no solo al teatro Villamarta, sino al resto de lugares, son los mejores, por eso están aquí. Creo que el precio es bueno porque lo que se ofrece es de primer nivel. No ocurre lo mismo en otros sitios, que sí cobran caro pero no dan cosas de calidad.

-¿Hay algo que no le guste del Festival de Jerez?

-Es imposible acudir a todos los espectáculo que quisiera (risas).

-¿Piensa que hay demasiados alumnos en las clases o son cómodas para las lecciones que imparten los maestros?

-Las clases se dan cómodamente y no creo que ni los alumnos ni los maestros podamos tener queja por eso. El número de cursillistas por clases es el adecuado, aunque eso luego hace que conseguir las plazas sea más complicado.

-Lo que le enseñan aquí, ¿le sirve para sus clases en Brasil?

-Todo lo que se aprende aquí es muy importante para nuestra formación.