Magdalenas en lugar de micrófonos. Esta fue la estampa que recibió en la mañana de ayer al presidente provincial del PP y candidato al Senado, Joaquín Ramírez, en la sede de la Asociación de Mujeres Profesionales y Empresarias de Málaga (Amupema), adonde acudió para charlar y conocer de primera mano algunas de las inquietudes de este colectivo. Tras más de una hora de fluida conversación, el político subrayó la necesidad de dar respuesta a uno de los problemas que más afecta a las emprendedoras, la necesidad de conciliar su labor profesional con su dedicación familiar. Y señaló las dudas que sigue provocando emplear a una mujer embarazada. "Cuando contraté a una mujer embarazada para que fuese jefa de prensa del partido hubo mucha gente que me preguntó cómo lo hacía", relató a modo de ejemplo, al tiempo que sentenció que en estos supuestos "luchamos contra lo que se ha convertido en una costumbre".

Ramírez, rodeado de una decena de mujeres empresarias, criticó las políticas de igualdad que buscan la paridad en las listas electorales y la estrategia de subvención diseñada por la Junta de Andalucía, de la que dijo es "irreal". Por su parte, Amupema aprovechó la presencia del dirigente popular para hacerle llegar un listado con ocho demandas del colectivo. De entre ellas, destaca la creación de un observatorio de la mujer empresaria y emprendedora, la concesión de subvenciones "reales" que permita fomentar el empleo y un mayor apoyo por parte de las instituciones malagueñas a las firmas impulsadas por mujeres.