Tres eran tres los presentadores de informativos de Cuatro afectados por los recortes no salariales, sino de tiempo para desarrollar sus escaletas: Miguel Ángel Oliver, Javier Ruiz y José Luis Fuentecilla.

De la noche a la mañana, la pasada primavera el canal de Mediaset optó por recortar drásticamente el minutado de su edición vespertina, convirtiendo el informativo en una especie de avance de lo que pudo ser y no fue, y dejando con la miel en los labios a quienes, ingenuos de nosotros, sintonizábamos con Cuatro con afán de, además de conocer el repaso de las noticias, entenderlas en su justa medida.

Pero las dotes pedagógicas de Miguel Ángel Oliver sirvieron de poco cuando de un día para otro se vio en la obligación de despachar todo el material de la jornada en escasos diez minutos. Insuficientes a todas luces para lo que él pretendía: narrar, contextualizar y divulgar cada uno de los temas abordados en el sumario.El nombramiento como Secretario de Estado de Comunicación imaginamos le vendría como anillo al dedo para quitarse el mal sabor de boca que, sin duda, esta situación le ocasionó. Tras el paréntesis del Mundial de Rusia, el 2 de julio se hizo cargo del informativo Javier Ruiz, otro periodista con inquebrantable afán didáctico. Pero tropezó con la misma piedra. Minutado insuficiente. Parquedad obligada. Y muchos temas en el tintero. Durante sus vacaciones ha tomado el relevo José Luis Fuentecilla, también excelente.La pena es que su informativo dura menos que la publicidad que Cuatro es capaz de acoger durante un periodo de sesenta minutos.

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