Paris Hilton sí que sabe sacar partido a los fines de semana de trabajo, aunque, claro, teniendo en cuenta que es una celebrity multimillonaria y que la tratan como una reina allá por donde va, pues no tiene mucho mérito, la verdad.

La rubia, que ha viajado hasta Ibiza para grabar un videoclip, fue la estrella indiscutible de las noches ibicencas, donde no dejó de cantar y bailar mientras era fotografiada y filmada por los discotequeros allí presentes. Ella, encantada con esto y consigo misma, dice en Twitter que le encanta Ibiza y que nunca se lo ha pasado "tan bien" en la isla balear, pero que quedó agotada de su trabajo, más duro de lo que parece, según sus propias palabras. A esto añadió que, de regreso, ella y sus inseparables amigas encargaron comida italiana y vieron Sexo en Nueva York. ¿Hay una pijada mayor? No.