Paquita, se llama Paquita. Era la primera 'seño' que tuvo Gerard Piqué en La Salle Bonanova, el gigantesco colegio de su barrio, cerca de la casa familiar, al que de vez en cuando ha regresado y se encuentra feliz contemplando el lugar de sus mejores recuerdos infantiles. 

Piqué no renuncia a su pasado, un tipo tan calculador pero a la vez tan sentimental, como muestra en toda su pasión en torno al FC Barcelona. Sobre su trayectoria escolar en La Salle, tampoco la olvida ni la esconde. Ha visitado de vez en cuando el colegio de su infancia. No está lejos de la casa de sus padres.

La Salle Bonanova compartió esta visita de Gerard Piqué a su colegio hace unos años

Su colegio de toda la vida, en el que entró cuando tenía tres años, allá por 1990, lo tiene muy presente. Cuando sucedía el mágico año 1992 (sus entrenadores Pep Guardiola y Luis Enrique obtuvieron la medalla de oro de fútbol con España, con aquel mítico gol de Kiko a Polonia en la final en el Nou Camp) sólo tenía cinco años. Piqué estaba a punto de entrar en Primaria. Y era como se le ve en la foto de arriba.

Y Paquita era la que velaba en aquella clase donde el rubicundo Piqué ya mostraba su talento con la pelota. Iba a ser futbolista del Barcelona, su sueño y su obsesión.

¿Cómo era el Piqué de niño? Muy simpático, como le podemos intuir, siempre dispuesto a formar parte del equipo, cariñoso con la 'seño' y compañero divertido y también competitivo en el aula y en el patio. En ese momento, un niño con  muchas ganas de jugar al fútbol (y ya lo hacía bien, por supuesto), pero no diferente a tantos con su edad. Piqué eclosionaría por su talento cuando al poco ingresó en las categorías inferiores azulgranas.

El futuro le llamaba a metas mayores pero nunca ha perdido el contacto con su colegio y con los profesores que en La Salle Bonanova marcaron su trayectoria estudiantil.

Gerard Piqué y Shakira, cuando todavía eran pareja.

De hecho se encuentra de vez en cuando con su seño Paquita y otros docentes cuando acude a una pizzería cercana al colegio donde encarga algunas veces los almuerzos familiares. Allí, mientras retirar el pedido antes de ir a su casa de niño se ha encontrado con profesores o con compañeros de clase y ha intercambiado efusivos comentarios.

Piqué es un hombre de negocios, ha sido una estrella del fútbol durnate dos decenios, pero no olvida de dónde procede. Sus padres le permiten seguir vinculado a las raíces de su barrio y de su colegio.