La Policía de Granada informó ayer que ha detenido a cuatro miembros de una banda que está dedicada a robar en cajeros automáticos mediante la colocación de cepos para capturar el dinero. La banda opera principalmente en la provincias de Sevilla y Jerez.

La detención se produjo hace unos días cuando el 091 comunicó que había saltado la alarma en un cajero automático de Granada. Los policías comprobaron que se había instalado un dispositivo tipo trampa para capturar el dinero mediante la manipulación de la ranura del cajero. Posteriormente, los agentes recibieron otra llamada informando de una segunda alarma, esta vez en otro lugar de la ciudad de La Alhambra. De inmediato los agentes se personaron y localizaron in fraganti a cuatro personas manipulando el cajero.

El 'modus operandi' de la banda consiste en la fijación de una pletina metálica de similar aspecto al propio metal del cajero. Esta pletina cuenta con un potente pegamento o cinta adhesiva de doble cara en su parte interna con el fin de que cuando un cliente de la entidad bancaria proceda a savar dinero, en el momento en el que los billetes se disponen para su salida, queden atrapados en el adhesivo. De este modo, se apropian del dinero.

Los cuatro detenidos pertenececen a un clan familiar que actúa en la provincia de Sevilla y Jerez. Las investigaciones siguen abiertas y no se descartan nuevas detenciones de miembros de organización pues anteayer, ya en Jerez, se volvieron a detectar más casos en plena calle Larga.