La alcaldesa Pilar Sánchez y el jefe de la Polícia Local, Manuel Cabrales, presentaron esta mañana a los medios la propuesta, no cerrada, eso sí, a la que se llegó ayer durante la mesa técnica de la motorada en la que estuvieron presentes representantes de la hostelería local, vecinos, y comerciantes, entre otros.

Lo más destacable, como ya se ha adelantado, es que la imagen del Jerez blindado que se ha dado en los dos últimos años pasará a la historia. Así, el centro, el Mamelón o avenidas tan señeras durante los días de Gran Premio como Álvaro Domecq o Lola Flores se abrirán a los moteros, aunque eso sí, bajo una premisa que la alcaldesa ha querido puntualizar: la “prioridad a la seguridad y al derecho de los vecinos de Jerez”.

Pilar Sánchez ha vuelto a señalar que esta apertura a los moteros es una “flexibilización controlada, que no una rectificación, del tráfico de motos para facilitar la actividad de hosteleros y comerciantes en tiempos de crisis” y advirtió que “Jerez no volverá a ser la ciudad sin ley que nos encontramos”, por lo que las gymkhanas volverán a estar prohibidas.

Y es que, para la alcaldesa, este dispositivo “no hubiera sido posible si no hubiera existido el plan de los últimos dos años”, y señala que, a pesar de todo, “este dispositivo nunca está cerrado del todo, depende de las circunstancias y el momento de cada año”.

Los espectáculos volverán a la Avenida Domecq

En cuanto al plan de tráfico en la Avenida Álvaro Domecq, ésta se puede decir que se dividirá en cuatro:

Desde la calle Sevilla hasta la plaza del Caballo habrá aparcamientos para motos y carriles para que puedan circular tanto motos como coches, aunque todavía se está estudiando la disposición de dichos carriles y de los aparcamientos.

Desde la plaza del Caballo hasta el Paseo de la Rosaleda habrá otro aparcamiento para motos y carriles habilitados para el tráfico de coches, mientras que el tramo que va desde la Rosaleda hasta la portada de la Feria volverá a habilitarse para zona de ocio (conciertos, carpas, etc.).

El último tramo de la avenida, el que llega hasta la glorieta dedicada a Álvaro Domecq, se destinará a aparcamiento para motos y para los vecinos de la zona.

La avenida de Méjico, hasta la glorieta y José Cádiz Salvatierra, antaño dos de los puntos más calientes de la motorada, volverán a estar cerrados al tráfico en 2009 hasta la glorieta de Juan Holgado. No lo estará la calle Córdoba, pero sí el Paseo de la Rosaleda, así como las calles interiores de la zona de Jerez 74.

Por su parte, la avenida Lola Flores volverá a ser transitable al tráfico de motos, si bien se está estudiando si dejar el tramo de avenida más cercano a los bares como zona de aparcamiento, con lo cual habría que habilitar el otro para dos sentidos, o bien mantenerlo tal y como está ahora. Prohibidas al tráfico de motos serán las calles situadas a la espalda de los parques Niágara e Iguazú (Andorra, Camarón de la Isla, Antonio González Flores, Francisco Riba, Avenida de Amsterdam, Amberes, Estocolmo...).

Por último, el otro foco caliente de la motorada, la Avenida de Europa, se mantendrá prácticamente como el año pasado. Los vehículos procedentes de la autopista serán desviados en la glorieta de La Granja al polígono industrial para salir por la glorieta de San Marino (esquina con el centro comercial Jerez Norte).

Según Pilar Sánchez, este dispositivo “gustó en lineas generales” a los vecinos y hosteleros, aunque subrayó que se “harán cosas sobre la marcha porque siempre van surgiendo ideas nuevas”.