Guadalcacín volvió a vivir ayer una nueva jornada de disfrute con las carreras de tractores. Multitud de visitantes se acercaron hasta la Entidad Local Autónoma para disfrutar de una competición que propició grandes momentos de emoción en el que fue el XXI Campeonato de Andalucía de esta modalidad, siendo la edición número XXV de esta peculiar carrera. El atractivo por excelencia de la feria guadalcacileña cumplió con las expectativas de un público que pobló las gradas desde horas antes del comienzo de la competición, que acabó con bastante retraso.

Fueron muchos espectadores los que por la mañana ya se habían acercado para ver las pruebas que los pilotos realizaron desde las 10 de la mañana. Tras estos entrenamientos quedarían estipuladas las parrillas de salida de las dos semifinales. La mayor potencia que tenían esta vez los vehículos -entre 250 y 500 caballos- hizo que los tiempos fueran menores a los de otras ediciones. Pero el calentamiento de por la mañana nada tuvo que ver con el gran ambiente que se viviría por la tarde, cuando más de 7.000 personas se dieron cita en el trazado según la organización.

Alrededor de las 18.30 horas comenzaron a rugir los motores de los tractores que participarían en la primera de las dos semifinales disputadas. El público se agolpó de forma masiva una vez más para vivir desde horas antes una competición que se puede catalogar como algo más que peculiar. Los primeros pilotos completaron ocho vueltas al circuito estipulado para la ocasión y se conocieron los nombres de los primeros clasificados para la gran final que debería haber comenzado poco menos de una hora después.

Sin embargo, nada más lejos de la realidad. La ambulancia preparada para la competición tuvo que atender una emergencia y comenzaron a retrasarse los horarios estipulados. A las 20 horas no había comenzado aún la segunda de las semifinales. Todo quedaba a la espera de la llegada de una nueva UVI Móvil que permitiera el comienzo nuevamente de las carreras. El público esperó con mayor y menor paciencia, pero el temor lo provocaba la cada vez más rápida caída del sol. La retirada del astro rey habría impedido la visibilidad de los conductores y la carrera habría tenido que suspenderse. Por suerte, nada de ello ocurrió y la competición continuó sin mayores problemas que los derivados de la mera práctica deportiva.

La segunda de las carreras volvió a ser más vibrante si cabe que la primera y dejó momentos para el recuerdo. Con la bandera a cuadros, los espectadores, que habían soportado con gran paciencia la espera, ya conocían los pilotos que disputarían la gran final del XXI Campeonato de Andalucía en las 'bodas de plata' de las carreras de tractores.

Las últimas ocho vueltas al circuito de Guadalcacín dejaron claro el motivo por el cual este es uno de los grandes atractivos de la feria pedánea. La lucha por el título de campeón de Andalucía no se decidiría hasta las dos últimas vueltas y fueron varios los pilotos que optaron a la victoria. A falta de dos giros para el final, apareció la bandera roja. La competición tuvo que reiniciarse con una 'vuelta lanzada' por el coche de seguridad, que tuvo que salir a pista por el choque entre los dos tractores que luchaban por hacerse con la victoria. Con la reanudación, el joven piloto guadalcacileño José Villena se coronó por tercer año consecutivo como campeón de Andalucía tras cruzar en primer lugar la bandera de cuadros. En segundo y tercer lugar llegaron Adrián Rebolledo y Miguel Ángel Vázquez, respectivamente.

La celebración de las 'bodas de plata' de esta competición ha dejado mucho espectáculo sobre la tierra. Sin duda, el próximo año muchos repetirán, tanto en la pista como en la grada, las cuales estuvieron pobladas hasta el final de la competición a pesar del calor reinante durante toda la jornada en la localidad pedánea.