CGT ha denunciado ante la Dirección General de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social el estado en el que se encuentra la piscina cubierta José Laguillo. En este sentido, el sindicato pide a la institución el cierre cautelar de estas instalaciones. Una de las razones que presentan para argumentar la petición es "el alto riesgo de desprendimientos de cascotes por el mal estado de parte del forjado de la piscina". Además, señalan que "faltan puertas de salidas de emergencias y hay dificultades de evacuación en caso de incendio u otros riesgos de esta índole ". CGT también constató "la inexistencia de un plan de emergencia y evacuación del centro de trabajo". El sindicato expresa "su preocupación por el alto riesgo que presenta la actual situación de las instalaciones municipales para los trabajadores y usuarios". Por estos motivos, "y por la falta de diligencias y rigor de la alcaldesa, pedimos su cierre cautelar por considerar que podría constituir un evidente riesgo", denuncian desde el sindicato.