Cedown va a devolverle al Ayuntamiento de Jerez la parcela que se le concedió en 2006 en El Altillo para que en ella construyera su nueva sede. "La crisis económica ha provocado que el acceso a las ayudas haya quedado completamente cerrado, motivo por el que nos es imposible construir el proyecto que teníamos planeado", destacó a este medio el presidente de Cedown, Cristóbal Romero Gandolfo. Se trataba de un edificio con 900 metros cuadrados de superficie que habría tenido un coste de 1,2 millones de euros, es decir, 200 millones de pesetas, una inversión que se escapa de nuestras posibilidades. A la hora de buscar fondos, los padres de Cedown han sondeado todas y cada una de las posibilidades a su alcance, entre ellas, incluso, pedir dinero al Príncipe de Asturias después de que éste recibiera una inesperada herencia por parte de un ciudadano. "Para ser fieles a nuestro ideario -apunta Romero Gandolfo- tenemos que aspirar a prestar servicio a los niños que están con nosotros, así como a los que están en lista de espera. Además, conforme los niños van creciendo sus necesidades van cambiado. La inserción laboral es, por ejemplo, uno de los principales retos que ahora tenemos por delante".

En la actualidad, Cedown sigue funcionando en su sede la plaza de Los Ángeles, en el barrio de Santiago, donde sobre 150 metros cuadrados sigue presentado servicio a 80 niños. "Al crecer la demanda de servicios también lo hace el lugar físico donde dichos servicios se imparten". La posibilidad de que Cedown tuviera dos sedes (quedando la de Santiago para los niños y las nuevas para los mayores) se ha descartado "pues de esta forma duplicaríamos gastos y nuestra economía no da para más". En la actualidad, Cedown da trabajo a una docena de personas.

Los padres de este colectivo han planteado a la alcaldesa, Pilar Sánchez, la posibilidad de que el Ayuntamiento les ceda alguna instalación municipal que se quede libre. Será justamente mañana jueves cuando Cedown celebre una asamblea con los padres. El objetivo de dicho encuentro no es otro que "proponerles que nos autoricen para buscar una alternativa rápida a la construcción de la nueva sede, algo que por lo ya comentado se ha tornado en un imposible".

Un hecho que Romero destaca especialmente es el desarrollo de una ley que pretende promocionar la autonomía de las personas aquejadas con síndrome de Down desde la más tierna infancia con vistas a que cuando sean adultos puedan manejarse por sí solos en la sociedad. "Queremos acceder a un Sepap, que es un servicio para la promoción de la autonomía personas de las personas con síndrome de Down. Con este programa se pretende que desde que nazcan hasta que sean mayores se le ayude a ser lo más autónomos que les sea posible".

La parcela de El Altillo -la mitad de la cual ya fue traspasada al Ayuntamiento para la construcción de dotaciones de carácter social y sanitario hace ahora dos años- se entregaría al Ayuntamiento. Se trataría de 900 metros cuadrados ubicados en una de las mejores zonas de la ciudad, entre Hipercor y los Jardines Escénicos. "Tenemos plena confianza en la alcaldesa pues sabemos que desde antes incluso de ser la primera edil ha estado siempre muy implicada con los niños que padecen Down. La solución puede estar en sus manos", destacó Romero Gandolfo.