Jerez

Cobra fuerza la hipótesis de que el caso de Torresoto fue un accidente

  • El juzgado que investiga la muerte de 'El Oso' espera que los resultados de pruebas científicas esclarezcan un suceso que sigue provocando una gran consternación

El caso de Torresoto no para de deparar sorpresas: la última hipótesis que maneja el juzgado instructor es que, probablemente, la muerte de Miguel G.S., de 63 años y conocido como 'El oso', podría haber sido por causas accidentales: es decir, que esa persona pudo caerse en su misma casa sufriendo una gran pérdida de sangre (teniendo, además, una enfermedad de coagulación y estando bajo tratamiento médico por ello) que le provocó la muerte, según ha podido conocer este medio. Otro dato importante y que parece avalar esa hipótesis es que el finado 'Oso' bebía más de la cuenta, indicaron sus vecinos momentos después de que el cadáver fuera descubierto tras d que otra persona llamara al 112 advirtiendo de que "algo fuerte" había sucedido.

Los primeros policías de la brigada de seguridad ciudadana que acudieron a la casa de la empinada calle Manuel María, de Torresoto, intuyeron que la muerte podría haber sido accidental. Otro hecho que no ayudó para practicar la inspección ocular y recoger las primeras pistas es que la citada vivienda carecía de luz: muestra de elloo es que el cadáver fue descubierto sobre las 19:40 horas del pasado jueves antes del cambio de hora: era penumbra.

El juzgado instructor y los investigadores policiales que trabajan a sus órdenes siguen haciendo gestiones de todo tipo para esclarecer el asunto que permanece bajo secreto de sumario ( ni las posibles partes personadas pueden tener acceso a información de las pesquisas).

Los resultados iniciales de la autopsia revelaron algunos datos iniciales, entre ellos que esta persona pudo haber sufrido una patada en su cuerpo, pero ese golpe pudo ser un simple hematoma interno sin fractura de costilla y como consecuencia de una mala caída, según ha podido conocer este medio. Se han recabado numerosas huellas tras varias inspecciones oculares en diferentes domicilios , entre ellas de la mujer que lo cuidaba, que podrían ser indicios pero no pruebas de cargo. El juzgado, como la policía judicial, hizo su trabajo de acuerdo a la normativa legal: recabar todos los indicios posibles para esclarecer el caso. Sin embargo, la clave del asunto parece estar en los resultados de los análisis que está realizando tanto el Instituto de Medicina Legal, de Cádiz, como el Instituto de Toxicología, de Sevilla, como han señalado fuentes oficiales de la comisaría. Ambas institucionesestán sobrecargadas de tarea, como han denunciado insistentemente los profesionales que trabajan en ellos.

Lo que está meridianamente claro es que el juzgado instructor ha desechado la posibilidad de un parricidio: como ya señaló este medio, fue la hija del finado quien manifestó esa hipótesis momentos después de que fuera hallado el cadáver la noche del pasado jueves.

Ante los antecedentes ya relatados, la Policía no ha practicado ningún arresto hasta el cierre de esta edición, confirmaron fuentes solventes de la comisaría.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios